Al rescate de Clooney carece de la garra necesaria. Si bien se presenta como una película de guerra, la acción dramática característica de este tipo de films tarda en comenzar, algo que incluso el guión reconoce explícitamente.
El resultado es desparejo y demasiado largo, con atractivas locaciones y paisajes chilenos y momentos aislados donde brilla el talento del director que revolucionó el cine hace décadas hasta que se dedicó a otro tipo de cosas.
Dado que también hay sentido del humor y algunos aspectos de la vida personal de Thor Heyerdahl, se puede afirmar que otro gran logro de "Kon-Tiki" es ofrecer algo para un público con diversos gustos.
Entre los huecos argumentales, hay imágenes atractivas, con mucho kitsch y moda fifties intercalados con imaginativas escenas alucinatorias que ayudan a equilibrar el conjunto.
El resultado presenta un ambiente cautivador, con una excelente banda sonora de jazz y un elenco formidable. Sin embargo, las casi dos horas y media de duración y la falta de ritmo narrativo afectan una propuesta que, aunque nunca pierde su interés, en ocasiones se torna confusa.
La trama policial carece de gran tensión, pero la narrativa, aunque sencilla, está bien desarrollada. Esto, junto con las sólidas actuaciones, logra mantener el interés del espectador.
El clímax de esta película presenta grandes momentos, aunque siempre queda la pregunta de cuánto mejor habría sido esta biopic bajo la dirección de un maestro del drama judicial, como el inolvidable Sidney Lumet.
La misteriosa y original música de Carter Burwell es un elemento clave que aporta una atmósfera única a esta excelente película, que incluso puede ser recomendada a los vegetarianos.
Más allá de los impresionantes efectos digitales, también merece reconocimiento el desempeño del elenco secundario, especialmente el de Eric Bana. Otro aspecto positivo de esta película clásica es la impactante banda sonora.
Comedia llena de momentos brillantes que la hacen recomendable, a pesar de que el argumento, en ocasiones, parece no tener claro hacia dónde dirigirse.
La conjunción de Spielberg en la dirección y el guión de los hermanos Coen hace que 'Puente de espías' realmente logre transportar al espectador a la Guerra Fría, con humor, pero sin ahorrar horrores.
La ambientación de época, junto con los momentos de acción y las impresionantes escenas épicas, siempre ofrece algo interesante. Incluso en su tono sombrío, se logra acentuar de manera efectiva la pesadilla stalinista.
Un drama biográfico que logra tomar con humor aún las escenas más serias, gracias a estupendos diálogos y un gran elenco, liderado por una excelente Amy Adams y Christoph Waltz.
Hay actuaciones excelentes, una muy atractiva ambientación de época y, por sobre todo, elaboradísimas escenas ultraviolentas que resultan especialmente feroces por tener algo que decir.
El film presenta una excelente ambientación en su época, creando un clima de creciente oscuridad y suspenso. Incluye momentos de drama periodístico clásico y ofrece una nueva perspectiva sobre un caso criminal célebre.