Para bien y considerablemente para mal, es una reinvención 'voyeur' de una vida triste plagada de misoginia, decorada con pericia técnica y una interpretación empática.
No ofrece nada que no se esperase de ella. La película de Michell desafía tanto lo tradicional como el espantoso empapelado que decora la casa de los Bunton.
Desde los recolectores de mejillones hasta la excavación de patatas, desde el mar hasta el río que marca una frontera entre la Guardia Civil franquista y el Portugal de Caetano, es un filme bello, pero inspirador en un estilo funcional.
Neeson se muestra tan potente como siempre en su rol de 'héroe': a sus 71 años, parece que seguirá interpretando este tipo de personajes, especialmente cuando hay un niño en peligro.
Es exagerada y quizá todo sea excesivo, pero cada episodio de 'Halston' impacta como esa sustancia molida en el bol de Elsa Peretti. No cometas el error de tomártela demasiado en serio.
El guion lucha por mantener su promesa inicial, pero presenta un mundo oscuro e intrigante que servirá como carta de presentación para Faith y su elenco.
Se coloca en una olla a presión de su propia auto-importancia. La historia de Noce atraerá a los curiosos, pero no parece idónea para el público de a pie.
Lo único que la salva es Crowe, quien a pesar de lo terrible que resulta la película, tiene una presencia escénica notable y se involucra en algunos diálogos que solo podría imaginar el propio Satán.
Un emocionante thriller político basado en hechos reales. Con una comprometida actuación de Ricardo Darín, digna de premios, esta tensa y larga película se sitúa dentro de lo mejor del género.
Es un musical y una obra nostálgica que genera sentimientos que es un privilegio experimentar. Es el trabajo menos convencional y más impresionante a nivel cinematográfico de McQueen desde 'Hunger'.