La combinación de géneros es generalmente efectiva y deseada; sin embargo, en esta ocasión se notó una falta de equilibrio. Las lágrimas y la sentimentalidad acabaron por consumir el suspenso y el miedo.
En este impactante documental, el director austríaco Ulrich Seidl retrata las experiencias de un grupo de turistas europeos, utilizando únicamente imágenes y testimonios de los cazadores. La ausencia de una narración en off y el tono seco y escéptico elegido por el director intensifican el horror de la historia presentada.
Como ocurría con la original, 'Intratables' camina por la cornisa de la sensiblería, pero no se cae. En su intento por divertir, emocionar y brindar una lección de vida, algunas escenas rozan la cursilería, aunque la película logra cumplir su objetivo sin caer en golpes bajos.
Por tratarse de una comedia, lo que podría haber derivado en un intenso drama, termina diluyéndose, aguado por chistes fofos y tranquilizadores. Como si se hubiera decidido no inquietar demasiado al público.
Es superior a la original. El oportunismo no quita que la película de la dupla Kölsch-Widmyer sea otra excepción a la regla de que toda remake es inferior a la original.
Tras los pasos de 'Paddington', el resultado es aceptable, aunque carece del irresistible encanto que caracterizaba a las películas dirigidas por Paul King. Lamentablemente, el guión no alcanza la misma calidad.
Darle la mamadera a un delfín bebé, la verdadera estrella del filme, y observar su relación con Winter son de los pocos momentos que realmente destacan. El resto se siente excesivamente melancólico.
Aquí no hay malvados: todos tienen su oportunidad de redención, en innumerables escenas que nos manipulan en busca de lágrimas. Gibson tiene tantas ganas de retorcernos las tripas que cae en el humor, con sangre que mueve más a la risa que al horror.
Sin hacer un gran alarde de recursos económicos, pero explotando con ingenio y habilidad los medios disponibles, Juan Dickinson y su equipo resuelven con solvencia el desafío de ambientación de esta historia.
La película presenta una serie de escenas reveladoras que impactan al espectador. En medio de estas experiencias, se incluyen diversas explicaciones. A pesar de ello, hay aspectos del enfoque pedagógico que resultan efectivos, lo que la convierte en un buen primer acercamiento a una figura fundamental del feminismo.
Klaus Härö consigue que 'El esgrimista' mantenga un tono sobrio y austero, reflejando el ambiente en el que se desarrolla la historia. De esta manera, logra evitar que la película se convierta en uno de esos melodramas lacrimógenos y aburridos.
Una de sus fortalezas es, a la vez, una de sus debilidades. Porque hay un elenco sólido para interpretar a una multiplicidad de protagonistas. Pero esta ramificación de personajes hace que, ninguno de ellos termine de tener la suficiente profundidad dramática.