Carece de la tensión propia de un verdadero thriller, ya que el personaje principal no consigue transmitir la complejidad de un psicópata, quedando como un simple individuo con problemas.
En su debut en Hollywood, el director surcoreano preserva su distintivo estilo. El resultado es un thriller inquietante que combina el barroco estilo de Park Chan-wook con una narrativa familiar intensa y sin concesiones.
Con solo tres personajes y actuaciones sobresalientes, la película logra transmitir un tipo de terror que se aleja de los excesos habituales, causado por el surgimiento de un pasado que se prefiere mantener en la oscuridad.
'La cura siniestra' se extiende innecesariamente, lo que afecta su enfoque y cohesión. Es una pena, ya que su premisa ofrece múltiples capas y oportunidades para explorar el terror psicológico.
El director construye una narrativa que combina elementos oníricos con el género policial, caracterizada por una estética algo artificial. Aquí, la verosimilitud pasa a segundo plano, priorizando que la historia se complete de manera coherente.
La película de Kaplan se adentra en lo absurdo y lo imperfecto, explora lo tabú y se entrega al camp y al trash. Ofrece momentos de feísmo resuelto que llevan a Pampita a atravesar un sufrimiento que culmina en una experiencia extrema.
Muntean no captura lo reprimido, sino la esencia de la represión. Sus encuadres son claros y meticulosamente elaborados. Siempre posiciona la cámara de manera que se maximice la escena, utilizando el mínimo de cortes y movimientos esenciales.
El protagonista representa la mayor debilidad de una película que, a pesar de ser bien intencionada y técnicamente correcta, resulta ser demasiado simple y predecible.
'La chica nueva' presenta una narrativa austera que refleja la frialdad de sus personajes y el entorno desolado en el que se desenvuelven. Los diálogos son breves y contundentes, y la película opta por cortes directos y numerosas elipsis, creando una atmósfera tensa.
La película, cuya temática es más relevante que nunca, presenta un estilo austero que refleja su paisaje. Sin embargo, para el campesino que es el protagonista, las emociones y experiencias se sienten intensamente en su interior.
'A Perfectly Normal Family' se cuenta a través de la perspectiva de Emma, alter ego de la directora, lo cual es fundamental ya que es una decisión narrativa crucial.
'Naomi Campbell' destaca por su excepcional atención al detalle visual, presentando encuadres que recuerdan a la pintura sin caer en la estética vacía. La alta definición aporta una claridad asombrosa, y el uso de imágenes granuladas refuerza el enfoque documental con un rigor estético notable.
Daría la impresión de que está llamado a despertar la empatía del espectador. Así como los internados. Este crítico, al menos, para que le pase eso necesita que los personajes sean tales.
La película no logra ser completamente satisfactoria. La conclusión se siente alargada, el tono a veces es demasiado serio y peca de incluir demasiadas desgracias. Sin embargo, presenta un estilo distintivo.
A mitad de la película, se produce un cambio drástico. Lo que antes era ambiguo se convierte en dicotómico, lo que estaba incompleto se revela, y la dualidad se simplifica a una clásica lucha por la supervivencia al estilo estadounidense.
El relato de 'Fuocoammare' es fragmentado, ya que el director opta por no conectar ambas realidades, llevándolas a coexistir sin interacción. Esta separación contribuye a que la película se sienta desequilibrada.
A diferencia de otras comedias de acción que hacen ingeniosos los momentos cotidianos, en esta película, los excesivos disparos y explosiones se presentan de manera convencional, y el humor resulta ser bastante complaciente.
La primera película del cineasta argentino residente en México es claramente autobiográfica y muestra el extenso y difícil camino hacia la madurez de Javi, el protagonista y narrador, que es el hermano menos destacado de un militante que ha desaparecido.