Joanna Hogg ofrece una magistral clase sobre cómo realizar una secuela: más profunda, más entretenida y más creativa que la anterior. Es una cineasta que se encuentra en el apogeo de su talento.
Rompe con la narración convencional a favor de un enfoque sofisticado y más elíptico. Requiere paciencia, pero ofrece abundantes recompensas. Interpretada a la perfección por Law y Coon.
La ambigua naturaleza de la justicia se maneja aquí con gran inteligencia, y el veredicto final te mantiene siempre en tensión. Sin embargo, con algo menos de indulgencia habría funcionado mejor.
Aunque no logra provocar una conexión emocional profunda, es una respuesta audaz, compasiva y poética a las biografías cinematográficas comunes. Además, reafirma a Kristen Stewart como una de las actrices más fascinantes del momento.
Hace algunas observaciones interesantes sobre las prácticas de los ciclistas, pero le faltan matices, especificidad y originalidad para ponerse el maillot amarillo.
A pesar de algunos momentos entretenidos y sangrientos, 'Halloween Kills' resulta fundamentalmente repetitiva, aburrida y desmerece todo lo que John Carpenter logró con la original.
El debut de Alice Lowe puede que titubee en control, especialmente en historia y tono, pero es una película atrevidamente evocadora que refleja a una cineasta de imaginación y promesa.
La película presenta impresionantes escenas de acción, cuenta con un elenco atractivo y una narrativa inspiradora. Sin embargo, considerando el tema, podría haber alcanzado un nivel superior.
El as en la manga es el mismo McEnroe, cuya presencia resulta cálida y convincente. Su sentido del humor brilla mientras es consciente de sus debilidades.