Un biopic extremadamente convencional sobre un escritor muy poco convencional. Traza conexiones entre vida y arte como muchos otros han hecho, pero le cuesta evocar la pasión de su protagonista por la escritura.
Cuenta la historia con algunas interesantes florituras estilísticas (un enérgico montaje de las argumentaciones finales de los abogados, por ejemplo) y sin manipulación emocional.
Ofrece suficiente resolución emocional para satisfacer a los amantes del cine comercial. Probablemente sea la mejor película que el director ha hecho para cines desde 'Wag the Dog'.
Por desgracia, incluso un espectador (como yo) que esté interesado en una película bélica del pasado recreada con valores de producción del siglo XXI encontrará pocas cosas con las que disfrutar.
La película opera según sus propias reglas moralistas, siguiendo un estilo clásico. Aquellos que son reticentes a las narrativas sobre hombres destacados que asisten a las minorías vulnerables, deberían evitarla.
Un drama maduro y discreto que se ve interrumpido por los elementos típicos del género. Es sincera y está bien hecha, pero su mezcla de tonos es poco convincente.
Una buena introducción tanto para los jóvenes curiosos como para los mayores nostálgicos, centrándose menos en la atracción principal del evento y más en cómo éste estaba destinado al desastre y fue un éxito.
Un biopic bastante convencional, que pese a que garantiza algunos momentos divertidos y anécdotas sorprendentes carece de aquella extrañeza que convirtió a Dolemite en un factor omnipresente en nuestra memoria cultural.
Un viaje entretenido. Tyrnauer ofrece un retrato sustancioso y fascinante que agradará tanto a los mayores como a los que nunca han oído hablar del club.
Una exploración tensa y divertida de un crimen famoso. Funcionará bien con los amantes del cine de autor y será útil para los estudiantes del comportamiento humano.