El documental más explícito políticamente de Mark Cousins hasta la fecha. Con una creatividad arrolladora, perspicaz y elegante, el material es emocionante.
Gutiérrez presenta su obra más impactante hasta ahora con un drama que aborda cuestiones sociales de manera efectiva. A veces, el filme se vuelve algo discursivo y su interpretación principal no siempre es sólida, pero promete ser bien recibida en festivales.
Este estudio hace evidente lo que ya sabemos, pero lo presenta de manera cautivadora, mostrando sensibilidad, ingenio y reflexión. Visualmente, se distancia de la representación cruda y directa que normalmente se asocia con este tema.
La riqueza de su premisa sugiere una oportunidad que no se ha aprovechado al máximo; sin embargo, es una obra singular que tiene el potencial de atraer la atención en festivales internacionales de cine independiente.
A pesar de las limitaciones de su simple trama, esta narrativa sobre una joven pareja que lucha por preservar su refugio en la playa logra conectar emocionalmente de una manera que hace que la experiencia valga la pena.
Te preguntas cómo es posible sacar tan poca aventura de un material tan rico. Con sólo unas cuantas actuaciones decentes, algunas imágenes impactantes y algunos momentos agudos.
Es elegante, muy atmosférica y está desarrollada con inteligencia, pero dado su tema, fracasa a la hora de ofrecer conexiones emocionales que la lleven al siguiente nivel.
Uno de esos proyectos que encuentra una historia en una nota a pie de página de la historia del cine, 'Sad Hill Unearthed' elabora esa historia en un relato de suave reflexión y emoción.
Aunque los eventos se desarrollan con rapidez, lo que hace que algunos personajes y temas profundos sean abordados de manera superficial, esta película aún logra captar la atención a nivel internacional.
Construida alrededor de la magnífica y desafiante actuación de Raphaëlle Pérez, la película confirma a Silvestre como uno de los nuevos talentos del cine español.
Podría haber sido un simple reportaje televisivo, pero la energía incontrolable de las personas implicadas y la cercanía de los directores con ellas enriquecen la película, llevándola a ser algo mucho más significativo.