Los espectadores más jóvenes disfrutarán del vibrante ajetreo, sin embargo, hay un verdadero significado detrás de los frecuentes solos de violín de Yi, que ajustan la película a una frecuencia diferente.
El sexista nido de víboras que fue Fox News bajo el reinado de Roger Ailes cobra vida en una dramatización que, con toda su rabia real, se percibe caricaturesca.
Perfectamente medida y decidida cuando debe serlo. Aunque en ocasiones resulta demasiado obvia al abordar ciertos temas, sería un error calificar sus fallos como un punto en contra.
Spring Breakers puede ser una sátira inspirada sobre la juventud o la comedia 'mainstream' más irresponsable que Hollywood haya hecho. Algunos argumentarán que es cruda y, además, radical.
Repleta de diálogos de gángsters que todo fan de Scorsese podría desear, la película muestra más solidez en sus momentos más tranquilos. Es una historia sobre la confianza rota, tanto en la familia como en Dios.
Las escenas que recrean los decorados de 'The Room' y las actuaciones de baja calidad poseen un atractivo particular. Sin embargo, la relación central no está bien desarrollada.
De todas las cosas por las que sentir nostalgia, la guerra parecería la candidata menos probable, pero esa es la insólita perspectiva de este hito único de 1943, quizá la película más maravillosamente británica jamás rodada.
Nos movemos por el suelo con estos animales, cuya impulsividad diaria encuentra una sinuosa expresión en uno de los trabajos de cámara más elegantes encontrado en un documental sobre naturaleza.
'Blackfish' intenta restaurar un sentido realista del peligro, entrevistando a ex trabajadores del parque que describen la mala calidad de vida de los animales, la formación no científica que reciben y la historia de la violencia entre las ballenas y los humanos que ha sido reprimida.
Goth es sobresaliente, exhibiendo una vitalidad verbal y una conexión con la realidad que no ha podido aprovechar hasta ahora. 'Pearl' presenta una historia original excepcional que ilustra cómo se desarrolla la crisis en tiempo real.
Coppola tomó la obra de Mario Puzo y la sumergió en un ambiente de paranoia nixoniana, explorando las complejidades del poder en las sombras de la política.