Una sólida versión de Guy Ritchie sobre la Segunda Guerra Mundial que cuenta una historia increíble, más o menos real, valiente, contundente y muy entretenida.
No es lo mejor de Guy Ritchie, pero las destacadas interpretaciones de Jake Gyllenhaal y Dar Salim como héroes unidos salvan un thriller militar que, de otro modo, estaría sobrecargado.
No se inhibe en mostrar su contenido aterrador, donde Mustonen realmente brilla. Sin embargo, a pesar de sus buenas intenciones, el desenlace resulta lamentable.
Una película que aborda con acierto su temática, cuidando cada detalle técnico y logrando mantener al espectador en tensión, esperando el próximo susto.
Ciertos segmentos se extienden más de lo necesario, mientras que otros se ven abrumados por sus altas expectativas, una característica común en las antologías.
Es una versión que no logra apreciar sus sorpresas y arruina un final sorprendente. Carece de la intensidad necesaria, suaviza la esencia y debilita el efecto, lo cual decepcionará a los verdaderos amantes del horror.
Apesta como un sótano lleno de cadáveres, ya que Leatherface se convierte en un villano más. Este no es exactamente el gran regreso que esperaban los fans de la franquicia.
A pesar de que se basa más en la tecnología, no supera significativamente a 'Searching'. Sin embargo, ofrece algunos aspectos interesantes en las investigaciones realizadas mediante WIFI.
Definitivamente funciona por razones totalmente opuestas a 'Becky'. Un festival sangriento lleno de diversión, incluso considerando los momentos de tranquilidad previos a que Becky desate su furia.
Es una verdadera delicia para los aficionados al terror y la acción, que impacta fuertemente, siempre que estés preparado para experiencias visuales intensas y perturbadoras.
Las propuestas sobre compañeros de piso que padecen sonambulismo y posesiones resultan estéticamente interesantes en ciertos momentos, aunque tienden a volverse redundantes al concluir la película.