En un solo episodio, consigue lo que a menudo no se ha logrado en temporadas enteras de la serie principal: introduce y profundiza en los personajes de manera auténtica.
Las estrellas Lauren Cohan y Jeffrey Dean Morgan brillan en sus papeles, ya que se sumergen en sus personajes y muestran una gran química en su actuación.
El thriller se sostiene sobre un giro poco interesante, aportando calorías vacías. Sin embargo, logra ser satisfactorio al intensificar los efectos audiovisuales y la obsesión de Anna, lo que contribuye a aumentar la tensión.
Su aspecto atractivo y su premisa no son suficientes para superar su indefinición en lo que respecta a construir su mundo o un tercer acto que zigzaguea cuando no debería hacerlo.
Dwayne Johnson y Emily Blunt aportan una energía increíble a esta divertida aventura. Su química es innegable, lo que convierte esta comedia de verano en una experiencia realmente placentera gracias a un guion entretenido.
La actuación de Stana Katic brilla con intensidad. El diseño de la serie muestra cómo nuestros héroes cometen errores repetidamente, y es al final del juego cuando todo queda al descubierto.