El control que tiene del tono es impresionante. Es esencialmente una experiencia sensorial que intenta constantemente presentar los sucesos de forma inteligente, sensual y sorprendente.
Es todo condenadamente delicioso, de la manera en la que sólopuede serlo las narrativas británicas sobre la inevitabilidad y la fácil familiaridad del sistema de clases.
No es una película con un guion tan ajustado como otras del género de gángsters protagonizadas por Cagney. Aunque dura 81 minutos, presenta cierta falta de fluidez, ya que muchas escenas no parecen seguirse de manera lógica o psicológica.
Es voluptuosamente hermosa, honestamente sexual, ocasionalmente perversa y terriblemente violenta. Es una película realizada por un artista en la cima de sus capacidades.
Es una película excelente que nos brinda una visión detallada de un período específico de la historia en un país determinado, un tema que las producciones comerciales y las plataformas de streaming, por razones evidentes, suelen evadir.
Vacía. Resulta complicado reseñar esta obra, ya que es incierto cuáles eran las intenciones de los realizadores y aún más difícil discernir si las han logrado.
Incluso cuando 'First Man' tropieza como psicodrama histórico, sigue representando un paso gigantesco hacia delante en lo que a películas sobre la experiencia física de volar se refiere.
Es una película que se te queda grabada en la mente después de haberla visto. Cada elección se hace con confianza, pero desde un lugar intuitivo, como las decisiones tomadas por un soñador lúcido.
[Crítica 3ª temporada]: la absoluta dedicación a una narrativa democrática, a veces produce la sensación de que ciertos momentos y subtramas están acelerados pero la totalidad del logro es muchas veces impresionante.
La segunda temporada es una de las mejores series de televisión de este ya excelente año, y el creador de la serie Noah Hawley, su equipo de filmación, y su elenco han perfeccionado lo que ya era un prometedor spin-off del clásico de los hermanos Coen de 1996.
Las actuaciones y caracterizaciones aportan un gran peso a la historia, mientras que el profundo ambiente ruso la distingue claramente de sus contrapartes estadounidenses.
Sospecha de cualquiera que te diga que con esta serie te partes de risa. Es mentira (...) Es intrigante, incluso sin ser capaz de justificar sus modestos seis episodios.