Una película que resalta la crucial relevancia de confrontar al poder con la verdad no debería preocuparse por embellecer sus crudas realidades, pero 'Nobody Speak' logra cautivar con su reflexión sobre el incierto porvenir del periodismo.
Kiyoshi Kurosawa demuestra una vez más su maestría con una obra aterradora que cumple con su título. Al no intentar desafiar las normas del género, logra aprovecharlas al máximo y presenta una historia impactante.
Por ahora hay suficientes motivos para que los devotos de la saga se muestren cautelosamente optimistas -e incluso un poco curiosos- ante los dos próximos capítulos.
No requería haber sido creada, sin embargo, resulta ser mejor de lo anticipado. Watts, aunque no se ha consagrado como una 'scream queen', muestra un desempeño deliciosamente inquietante, demostrando su experiencia en el género.
Ni siquiera un brillante John Choo puede rescatarla de un final poco acertado. Su intento de conmover al público resulta en una reacción de incredulidad.
Miller muestra una preferencia evidente por los efectos visuales de la violencia y los excesos sangrientos, en lugar de ofrecer motivaciones creíbles que generen empatía por aquellos que realmente sufren las consecuencias de la brutalidad.
Sono consigue infundir una sinceridad conmovedora en un contenido provocador. Parece que la producción se realizó en cuestión de días y que el guion fue elaborado en un tiempo similar.
Se encuentra al nivel de 'Fear Street' y la adaptación televisiva de 'Scream' como una propuesta satisfactoria, aunque de menor envergadura, en un género que aún busca revivir su esplendor de los años 80.
McCarthy se reúne con Emilio Estevez, Ally Sheedy, Demi Moore, Rob Lowe y otros para explorar lo que implica ser parte de un club que a menudo es cuestionado en su reputación.
No ofrece una perspectiva inédita que no hayamos encontrado en otros documentales musicales, pero destaca al explorar las razones por las que buscamos el arte como vía de escape y nuestra reacción ante su ausencia.
Jon Hamm y Tina Fey logran que anheles que esta comedia criminal oscura se convierta en una comedia romántica. Sin embargo, la película enfrenta dificultades para equilibrar su contraste tonal.