Si bien cumple su objetivo, es evidente que su intento de resaltar lo absurdo de la trama se siente más como una colección de sketches que como una película coherente. A pesar de esto, el elenco logra aportar lo mejor de sí con chistes sencillos y se destaca especialmente en los momentos más sutiles.
La quinta entrega de la saga de terror sigue la senda que sus antecesoras y hace honor a su legado con la participación de algunos de sus personajes más memorables.
La actuación de Darín resulta ser solo una sombra de sus papeles en 'Nueve reinas' o 'El aura', donde encarnaba a otros ladrones que, a pesar de decir menos, lograban transmitir mucho más.
Una actriz tan inteligente como sensible, en esta oportunidad Gyllenhaal debe arreglárselas con un guión que tiende a colocar a su personaje en situaciones algo forzadas, especialmente en el tramo final de la película.
El entusiasmo estético de Madonna por el pasado le impidió dedicar el tiempo necesario a la creación de un guión que estuviera a la altura de su ambiciosa propuesta.
Una fallida comedia salvada por su elenco estelar. A medida que se desarrolla la historia, la comedia se diluye y deja lugar a una puesta en escena que elige siempre la exageración y el trazo grueso.
Sorprendente comedia. Más allá de algunos chistes efectivos, hay otros más simples que seguramente atraerán a un público infantil, además de que las canciones son más ingeniosas que melódicas.
Rodríguez logra crear un relato entretenido que, con gran ritmo, ternura y humor, narra una historia que resalta la importancia de la amistad, la autoestima y la colaboración.
Como un juego de muñecas rusas al infinito, la obra de Caden se expande y repite sin un estreno ni público definidos. Se presenta como un sueño obsesivo y megalómano, oscilando entre la pretensión y la confusión, lo que genera una experiencia emocionante.
James no busca revolucionar el humor con 'En los boxes' y no lo hace. Sin embargo, sí demuestra que en las manos correctas, la sitcom tradicional todavía tiene mucho para dar a la TV.
Dirigida por el sueco Lasse Hallström, esta película no se asemeja a su trabajo en 'Salmon Fishing in the Yemen' y, en cambio, se une a sus otras obras en las que el director oscila entre el exceso de sentimentalismo y la falta de sabor.
Sin frases aleccionadoras ni golpes bajos, 'Abbott Elementary' aboga por la amabilidad y la solidaridad sin agregarle exagerado peso a las situaciones que explora con humor.
Una comedia desenfrenada en la misma línea de las dirigidas por Todd Phillips y Judd Apatow, que entretiene, aunque no alcanza a provocar las risas estruendosas de sus referentes.