Jude se establece como un director que sabe otorgar relevancia a los espacios, no solo para marcar el encuadre, sino también para evocar el estado de ánimo que desea transmitir. Resulta una propuesta muy interesante.
Pequeño juguete que sin más ambición que la de contar una historia pequeña termina por ganarse al espectador por su frescura y honestidad. Muy disfrutable.
Dura película-ensayo que en sus mejores momentos evoca la lucidez de Godard en Al final de la escapada. Sin embargo, en sus puntos más débiles, se queda en una simple bufonada. Es un visionado obligatorio para quienes se interesan en los ejercicios de vanguardia.
Una comedia negra realmente divertida. No solo cuenta con ingenio e inventiva, también es un film que refleja una mirada tierna y respeto. Una verdadera genialidad.
El mérito de McDonagh radica en su habilidad para equilibrar el humor y el drama, respaldado por un reparto excepcional. Aunque se pueden señalar ciertas fallas, en general, es una película sólida y robusta.
Musical con buenos instantes de comedia negra durante su primera mitad, ablandándose en la segunda hasta casi cambiar por completo la idea de la película.
En Pixar, la creatividad siempre potencia la historia. Es encantador, está bien hecho y posee esa chispa mágica que solo esta empresa puede aportar a sus obras.
Erra al intentar replicar la poesía naturalista de Hayao Miyazaki y Studio Ghibli, convirtiéndola en una fórmula que no termina de cristalizar y que termina cayendo de lleno en la cursilería.
De una imaginación desbordante, la obra establece una crítica social clara centrada en la lucha de clases. Su tesis es tan astuta como estimulante, evocando la libertad creativa de filmes notables como El viaje de Chihiro o Paprika.
Como documental deportivo, es una obra fuerte que también captura la esencia de una época y un lugar específicos. Es un trabajo que se puede ver con facilidad y que, además, resulta entretenido.
Con una banda sonora completamente ochentera y una dirección austera que evoca a grandes como Carpenter, Friedkin o McTiernan, esta película cautivará a los amantes del cine anacrónico al estilo de Drive. Es realmente impactante.
Un intento de thriller al estilo Hitchcock, con falsos culpables y giros de guión imposibles que se ve y se olvida al momento de salir de la sala de proyección.
Una extensa secuencia de acción. A pesar de que el guión es débil y se siente incompleto, su calidad técnica es lo que realmente hace que la experiencia de verla sea valiosa.
Esta película combina magistralmente fantasía, mitología regional y un profundo romance, resultando en una obra visualmente impresionante y sorprendente. Si son aficionados a los cortos de animación de League of Legends, definitivamente la apreciarán.
Destaca por su colosal trabajo artesanal y la notable composición musical que acompaña a la imagen, creando un ambiente enrarecido, de inquietante cuento de hadas.