Las protagonistas elevan la película más allá de ser simplemente una historia sobre los inicios del movimiento #MeToo. El guion presenta un carrusel de diversas estrategias narrativas que se convierte en su gran fortaleza.
Contiene toda la verdad de la adolescencia, una emoción enternecedora. Todo aquel que se haya aferrado a un casete como tabla de salvación en su época de adolescente rebelde conectará de inmediato con los protagonistas.
Quizá Kraume debió moderar el tono en el segundo y tercer acto, sin embargo, la lección sobre lo egoísta y cruel que fue el sueño de la dictadura del proletariado resulta impactante.
La película muestra la resistencia de la joven de una manera detallista y respetuosa, a través de la mirada de la cineasta. El resultado es profundo y sincero, con un emocionante impacto. Es una grata sorpresa dentro del cine indie.
'Fallen Leaves' confirma que crear un cine tan bellamente pulido es un talento que poseen solo unos pocos. Esta película se destaca por encima de todas, convirtiéndose en la mejor del 2023.
Una hermana y la otra son dos visiones fascinantes de la feminidad en el cine de Ozu. Estas representan un Japón fracturado por la guerra, un tema que Ozu busca reconciliar en sus obras magistrales.
No es la primera vez que Egoyan se lanza sin red hacia historias corrosivas y algo delirantes, pero seguramente es de las ocasiones en que lo hace de manera más simplona y burda.
Entre la turbación y el espíritu de Éric Rohmer, esta película veraniega se presenta como un 'Cuento de verano' hiperrealista y apocalíptico, consolidándose así como otro triunfo de Petzold.
Estupendas y enérgicas Milena Smit y Olivia Baglivi. Si no fuera por el tête-à-tête interpretativo de estas actrices, la propuesta no avanzaría mucho más que el videoclip previo del autor para el tema Wondering.
Conmovedora. Sostenida por un austero naturalismo estético, Salitt nos muestra a las dos mujeres de un tiempo al siguiente utilizando, y de manera magistral, el fuera de campo y las elipsis.
No es tan impresionante como podría haber sido, ya que el apego a los códigos de Disney afecta tanto el ritmo de la película como su capacidad para sorprender. Sin embargo, la fórmula en general sí cumple con su objetivo. Todo esto se presenta de manera sencilla y sin excesos.
Tan pronto se enfoca en algunos estilos de los grandes del cine, como se deja llevar por la naturaleza salvaje que retrata. El drama emocional resplandece como destellos de belleza.
Gana cuando expone la ternura y belleza de los sentimientos y se diluye cuando llega el consecuente discurrir de los sucesos, donde, paradójicamente, lo melodramático pierde intensidad.
Es cuando Aurel nos transporta a la oscuridad que vivió Josep en Argelès-sur-Mer. La película se convierte en una abstracción conmovedora, mientras los dibujos del republicano impactan y realmente causan dolor.