Bell es un personaje cautivador al que realmente deseas seguir en cualquier aventura. Su carisma es irresistible y logra que todo lo que acontece a su alrededor tenga relevancia. Su presencia eleva la historia y mantiene al espectador enganchado en cada momento.
'Infiltrados en la universidad' es increíblemente divertida, a veces incluso en forma exagerada. Se burla de su propia lógica absurda y nos invita a disfrutar.
Te reirás mucho y muy a menudo. 'In the Loop' merece ser un éxito rotundo. El reparto está estelar. Y demuestra que lo inteligente y lo gracioso pueden coexistir en una película, incluso en verano.
Will Ferrell y Danny McBride tienen el talento de convertir en algo absurdamente divertido cualquier material. Sin embargo, 'El mundo de los perdidos' resulta ser considerablemente menos emocionante que eso.
Justo cuando creías que el true crime había llegado a su fin, llega 'Black Bird' para revitalizar el género con una historia tan brillantemente actuada, escrita y dirigida que te mantendrá en suspenso durante sus 6 episodios.
Fanning es asombrosa. En lugar de repetir otra historia de crímenes reales, esta serie única e inolvidable nos invita a abrir nuestro corazón y sentir su mensaje. Esa es la verdadera diferencia.
La película demuestra el axioma de que la verdad es más extraña que la ficción, capaz de sacudirte con sorpresas que no ves venir (...) 'Operation Mincemeat' es un hechizo que no olvidarás
Tom Holland es un actor tan impresionante que casi hace que perdones las fallas y la excesiva duración de 'Cherry', otro drama de adicciones que no sabe cuándo dejarlo.
Endulza la realidad con humor y un poco de ficción, ofreciendo emocionantes carreras que aceleran el pulso. Es cursi, sí, pero logra funcionar de maravilla.
Tiene mucho más en la cabeza que el empalagoso escapismo romántico de su superficie. Aquellos que no tengan suficiente de amor mezclado con tragedias personales, estarán en el cielo.
Una película que se aleja del típico thriller legal. Lo que lo convierte en una obra de Haynes es un elemento intangible y enigmático que la distingue.
Jackman y Janney destacan en sus papeles. Al final, el espectador se encuentra con una provocación fascinante que critica la cultura del dinero y nos convierte en cómplices.
Una incómoda mezcla entre realidad y ficción que no logra capturar la magnitud de lo sucedido. Su puesta en escena es sólida y demuestra un trabajo profesional, pero queda la duda sobre el propósito de tal enfoque.