Amy Adams ofrece una actuación sobresaliente en esta secuela de la aclamada película de 2007. Sin embargo, la trama resulta confusa y los números musicales carecen de inspiración.
La película destaca por su honestidad en relación a su época, lo que la distingue de otras producciones familiares que puedas ver este verano. Se presenta como una gran aventura en manos capaces.
'Piercing' ofrece una hora y 20 minutos de pura diversión, aunque ocasionalmente parece un cortometraje que se ha extendido más allá de su duración óptima.
Una de esas raras películas de terror con una premisa inmejorable: un grupo de aliens chupadores de sangre tienen una alergia fatal a la sangre humana porque ésta contiene un alto porcentaje de alcohol.
Ni Mickey Rourke ni John Cleese logran rescatar esta comedia sexual de finales de milenio. Es, sin duda, la película más débil de la carrera de Polanski.
Siendo generoso, la describiría como post-postmoderna; siendo honesto, diría que es una debacle. La estupidez autoconsciente no se puede comparar con el ingenio.