Hay banderas que uno no puede asumir, como ocurre con la bandera de esta comedia triste o triste comedia. Así acaba arrastrada por el fango de las metáforas y uno se enreda en ellas, hasta llegar al hartazgo.
Tiene el filme un estilo propio, descarnado. Pero ese estilo, caracterizado por tomas largas y sin concesiones, se desvanece debido al exceso de condescendencia por parte del director.
Una gamberrada en tono menor. Resulta una película espectacular, eso es innegable, para esos momentos de impunidad. En la que sobran estrellas, como Blanchett, y falta corazón.
El poder se presenta en esta obra como una lucha de sexos, evidenciando la dinámica de mando y sometimiento. La película de Polanski invita a reflexionar sobre si esta confrontación implica elementos de masoquismo. Es una cuestión intrigante que aborda de manera efectiva.
Una película extensa donde las brutalidades carecen de sentido y humor, resultando en una sensación de saturación. Danny Trejo aparece, pero llega a ser cansino. Lo más destacado es el elenco.
Hasta que no aparece Kevin Costner, la historia se mantiene en la indefinición y en lugares comunes. Su presencia añade una capa de épica al filme que, de otro modo, tarda en alcanzar. Sin embargo, al final logra este objetivo.
Es cansina e indiferente; aquí falta historia y sobran ocurrencias. Destaco, por destacar, el trabajo de la adolescente Mckenna Grace. Lo demás se olvida antes de abandonar con prisas la sala.
Un capítulo oscuro de la historia que el filme de Paul Mignot y Vincent Mottez eleva a través de la valentía de sus protagonistas y los valores eternos de Francia. Podría considerarse un episodio desafortunado del canal de Historia.
Es un documental audaz y catártico, donde gran parte de la familia logra romper el silencio. Especialmente el padre del director, cuya desarmante sinceridad atrapa al espectador.
La finura no ha sido una de las virtudes del trabajo de J.C. Chandor. Burda y sin matices, este Kraven lo apuesta todo a las escenas de acción. Sutil como una lija del cuatro. Kraven, amigo, te merecías algo mejor.