Al final del año en el que lo transgénero ha dejado de ser transgresor, la historia de la artista Lili Elbe es una de las películas más elegantes del año.
King debuta como directora con una adaptación segura y electrizante. Desde el comienzo, se percibe el profundo sentimiento de King hacia el proyecto y su habilidad para adaptar y expandir la obra, manteniendo la intensidad de los diálogos, que sutilmente van lanzando bombas emocionales.
Jacki Weaver y la interpretación de Franco sobre el poco explorado proceso del montaje cinematográfico son interesantes, pero no logran rescatar esta débil y autoconsciente película.
¿Puede alguien colocar a McKay al frente de todos los biopics? En lugar de presentar un típico ladrillo aburrido, McKay se divierte explorando el perfil de Cheney y experimenta con el género sin restricciones.
La película biográfica de Helen Reddy presenta a una protagonista excepcional. Gracias a la actuación de Cobham-Hervey, la historia resulta cautivadora y, a la vez, bastante familiar.
La historia presenta elementos muy familiares, incluyendo a los personajes femeninos en situaciones de asedio y los himnos que se incorporan en la narrativa. Además, las erupciones de violencia resultan predecibles.
Cuenta una historia profundamente conmovedora y ocasionalmente desgarradora. El dúo formado por Jordan y Foxx muestra una notable química en su actuación conjunta.
Dado el sello de Disney, se puede percibir el optimismo a distancia, aunque la trama nunca alcanza la profundidad necesaria para destacarse dentro del género de equipos de perdedores.
Este documental es una emotiva carta de amor a la relación fraternal que retrata. Ofrece una perspectiva fascinante sobre lo que ocurre tras bambalinas.
El director Daniel Algrant tomó una excelente decisión al elegir a Badgley, quien supera la etiqueta de 'hecho para la TV' con una interpretación digna del inolvidable falsete de Buckley.
Más extraña y reflexiva que muchas de sus compañeras de viajes en el tiempo, 'Predestination' es un elegante viaje mental. También señala a la actriz australiana Snook como un talento a seguir.
'Darling' se inspira notablemente en 'The Shining'. Sin embargo, el director Mickey Keating logra establecer su propio estilo dentro del género de psicópatas y obsesiones, incorporando referencias a los clásicos.
El amor es el eslabón débil de esta comedia romántica, que se presenta de manera torpe y se siente más como un anuncio informativo hipster de Austin, Texas.