Hollywood necesita más películas sobre la amistad femenina y que pongan a las mujeres mayores en primera línea. Sin embargo, hubiera deseado que esta película fuese mejor.
Inventiva y conmovedora, es una obra para todas las edades en el mejor sentido, sin condescendencia ni frenetismo. Las interpretaciones de Brealey, Earl y Hayward son increíblemente dulces y sinceras.
Su sabor no dura mucho en el paladar, pero es un vaso generoso. Una carta de amor cómica a la amistad femenina y la mediana edad que alterna entre lo salvaje y lo predecible.
Un escaparate ligero para un talento de peso. La dirección se siente plana y funcional. Sin embargo, las actrices, con un rango de edad entre 65 y 80 años, demuestran una vitalidad creativa notable.
Su mezcla de 2D y animación por ordenador utiliza una paleta vibrante, mientras que su narrativa transita entre el mundo espiritual y el reino animal, con una profunda corriente de anhelo y elementos mágicos.
Aunque el guionista y director Hannes Holm toca algunos acordes interesantes al mezclar humor y emoción, no confía en que los espectadores puedan llegar a sus propias conclusiones.
Trueba y Mariscal abordan un difícil equilibrio en su nuevo film, celebrando el embriagador ritmo de la bossa nova e investigando al mismo tiempo la devastadora brutalidad del terrorismo de Estado. En su mayor parte, lo logran, certificando su talento como cineastas.
Es un recordatorio desgarrador de lo poco que sabemos - o estamos dispuestos a saber - sobre la inteligencia y las vidas emocionales de las criaturas no humanas.
Un éxito absoluto. El artístico e íntimo documental de Lo se une a una serie de películas de no ficción que se centran en el misterio de las relaciones entre animales y humanos, así como en la necesidad de reconsiderar lo que damos por sentado.
Una aventura emocionante; inspiradora y desgarradora a partes iguales. La esperanza y la desolación son inseparables en esta propuesta urgente y llena de suspense.
No es ninguna sorpresa que los atletas de la historia logren su improbable objetivo; lo que importa es cómo el director nos lleva hasta allí. En el caso de 'The Boys in the Boat', las sorpresas residen en los pequeños momentos y las notas de gracia.
La película se apoya tanto en la belleza como en la pena. De manera emocionante y adorable, 'Charlotte' hace que las pinturas de la artista cobren vida.