Es retrógrada, excesiva y convencional. También es sincera, enérgica y encantadora. 'Tiger Zinda Hai' es una película de acción con más carne roja que materia gris.
Yau ha confeccionado una obra que abarca diversas emociones: un homenaje peculiar a un monstruo carismático y una conmovedora elegía para un filántropo que, a pesar de sus buenas intenciones, lidia con profundos conflictos internos.
La reciente colaboración de Waxman y Seagal resulta ser un esfuerzo vacío y pretencioso que no logra mostrar el talento de su protagonista, lo que la convierte en una experiencia poco recomendable incluso para los cinéfilos más entusiastas.
'Operation Napoleon' resulta al menos reconfortante con su historia de thriller en un aeropuerto, aunque la falta de ritmo, la ausencia de alegría y su tono agotador la hacen difícil de disfrutar.
Encuentra un tema intrigante en esa línea ambigua, pero nunca profundiza lo suficiente para comunicar realmente lo que significa ser invisible mientras se sirve a la patria.
Una historia ambiciosa y atractiva. La experiencia de ver este drama anticlimático de tres horas resulta deprimente y triste, pero de manera poco efectiva.
Tribunales, cocaína y filosofía cósmica que no van a ninguna parte. Una mezcla rara de clichés del género e ideas poco desarrolladas sobre la justicia social y las realidades alternativas.