La estrategia de 'Blinded By The Light es, en resumen, reflexionar sobre algunos de los aspectos más importantes de la vida mientras disfrutamos de una plétora de escenas agradables unidas a la conmovedora música de Springsteen.
El confiado debut de Paul Dano en la dirección es inteligente, sutil y cautelosamente emotivo. La película es un maravilloso escaparate para Carey Mulligan.
Puede que 'A Ciambra' sea una historia convencional de un joven intentando encontrarse a sí mismo, pero la atención a los detalles que presta el guionista-director enriquece la propuesta.
A pesar de la sincera y encantadora actuación del emergente Nat Wolff, 'Paper Towns' transita por senderos desgastados y sufre por una actuación poco convincente de la debutante Cara Delevingne, quien no resulta tan intrigante como lo exige la trama.
Aunque en todo momento pretende ser un cuento de hadas, esta nueva 'Annie' resulta especialmente materialista y superficial, un desfile interminable de chucherías caras y ropa de lujo.
Kormakur logra crear secuencias de suspense que resultan ingeniosamente tensas, aunque en ocasiones caen en lo cursi. 'Beast' se queda frustrantemente corta, sin aspirar a ser más que una película de acción competente y desechable.
Su mensaje merece la pena, pero los espectadores podrían preferir haber visto un documental sobre sus verdaderos protagonistas, antes que esta dramatización honesta y convencional.
Del Toro se aleja de su habitual fascinación por criaturas exóticas y seres extraños para presentar un estudio sobre algunos monstruos de la vida real en este noir, que destaca más por su atmósfera que por sus personajes intrigantes.
Un par de interpretaciones excepcionales son la base de un debut profundamente conmovedor. Su estilo narrativo puede ser difícil de entender, pero Hopkins y Colman lo tratan con tanta naturalidad que se convierte en la triste realidad de sus personajes.
No puede resucitar el género de superhéroes por sí misma, pero su ingenuidad y su profundidad sentimental nos recuerdan lo que hemos echado de menos durante tanto tiempo.
Aunque llena de ambición y algún momento ocasionalmente fascinante, este misterio de los años 30 alardea de un espíritu despreocupado que supera con creces su intrincada historia y a unos protagonistas dramáticamente endebles.
Con sus 84 minutos, sin incluir los créditos finales, es innegablemente ligera. Pero también su modestia es un alivio. Casarosa le da a su película y a su humor fácil un espacio para respirar.
Theodore Melfi se excede con los aspectos pastelosos y como resultado la película no tiene la sutileza emocional que un material tan delicado necesita.
Su honestidad y descaro a veces resulta interesante, pero Dolan subestima el interés que suscita su argumento. Por desgracia, ninguno de los dos protagonistas se define más allá de su angustia.