La nueva película del guionista-director Jim Strouse presenta personajes entrañables que buscan dar lo mejor de sí. Logran ofrecer una compañía cálida y acogedora.
Un drama conmovedor y frecuentemente divertido sobre dos personajes dispares. Esta película supera sus irregularidades al encontrar profundos depósitos de emoción y reflexión.
'Green Room' carece de la poesía melancólica y la profundidad temática de 'Blue Ruin', la anterior película de Jeremy Saulnier, pero este desgradable thriller de serie B cumple con lo suyo: sangre, recuento de cadáveres y humor negro.
Hay quienes argumentan que 'Shame' es excesivamente dura en su análisis del devastador impacto de la adicción. Si esto es cierto, entonces 'Thanks For Sharing' podría ser tildada de ser demasiado superficial.
Este discreto de Hung nos invita a mirar más allá de sus deliciosos despliegues para saborear los placeres cotidianos que nos arriesgamos a dar por sentados.
Una historia de redención que carece de un poco más de condimento. A pesar de ser una película centrada en un chef audaz que desea desafiar a sus clientes, 'Burnt' en gran medida se presenta de manera muy convencional.
Como una novela cautivadora, la serie se toma su tiempo para revelar a sus protagonistas. Las escenas de diálogo, organizadas de manera natural, resultan realmente intrigantes.
Una mezcla desigual pero al final entretenida, de sustos y reflexiones. A pesar de que algunos chistes no logran funcionar, las ideas presentadas son brillantes.
A pesar de los peces carnívoros, la parodia de terror de bajo presupuesto de Peter y Michael Spierig aporta muy poco nuevo al género de los muertos vivientes.
Una visión reflexiva, y a menudo muy divertida, sobre alguien que lucha por ser fiel a sí mismo, a la vez que aprende sobre los aspectos en los que realmente necesita cambiar.
El comienzo es entretenido, pero el desarrollo no es capaz de ir un paso por delante de la audiencia y acaba amontonando ridiculeces hasta que es imposible tomársela en serio. McKellen es una compañía maravillosa.
Un western revisionista que resulta entretenido y va ganando relevancia de manera inesperada. Critica las convenciones del género mientras respeta los elementos que hacen que su entorno sea eternamente mítico.
Noah Baumbach presenta una nueva y conmovedora interpretación de uno de sus temas recurrentes: la frustrante imposibilidad de una familia. Hoffman brilla en su actuación, mientras que Adam Sandler entrega su trabajo más matizado hasta la fecha.
Un melodrama ferviente en el que las emociones exageradas lo sepultan todo a su paso, incluida la empatía de la audiencia. Jasmine Trinca es la fuerza que mantiene a la película.
Antes de empezar a perder fuelle en su tercer acto, 'Trainwreck' es una mezcla habilidosa de risas, romance y emoción - por no mencionar uno de los trabajos más pulidos y maduros de Apatow.