'Upstream Color' es ciertamente algo que merece la pena ver si te interesa la técnica brillante, el montaje expresivo, la narrativa oblicua, la ficción especulativa oscurantista o el descubrimiento de una interesante actriz nueva.
Un triunfal regreso de una de las series favoritas de los niños del siglo pasado, con la mirada puesta en lograr su objetivo de contentar a los viejos fans además de ganar nuevos adeptos.
'Daddio' es un golpe de efecto, un logro sorprendente de una talentosa cineasta casi desconocida, algo con lo que muchos sueñan pero que ocurre raramente. Sean Penn brilla en su mejor actuación.
Destaca más por su punzante indignación política que por su credibilidad dramática, la cual se va volviendo cada vez más superficial con el desarrollo del relato.
Dramática y filosóficamente vacía, la película carece de provocación. No sucede nada relevante y, se debe admitir, resulta bastante aburrida durante su primera hora.
Es su trabajo más efectivo desde 'Auto Focus 15'. Sin embargo, carece de la energía y el estilo necesarios para que el espectador olvide la estructura esquemática de su construcción dramática.
Una comedia de vergüenza, malestar y ansiedad que se vuelve más graciosa según avanza. Un largometraje debut de una confianza y un control inusuales, y con un estilo propio.
Cedar ofrece un retrato complejo y detallado de las interconexiones entre las afiliaciones políticas, financieras y religiosas que influyen en el funcionamiento del mundo.
Pone en movimiento todos los aspectos de la superficie con efectividad, pero, sobre todo, no ha prestado suficiente atención a las corrientes turbulentas de tensión e intriga que se requieren en estas circunstancias.
Una producción de bajo coste con talento, pero inmadura, que se sitúa en la frontera entre el thriller y la obra de arte con unos resultados irregulares. La película no es del todo aburrida y sin duda tiene sus momentos.