La película opta por lo seguro, resultando en un producto comercial y algo superficial, pero la química entre Guttenberg y Hannah aporta cierta profundidad a esta producción de gran presupuesto.
A pesar de contar con numerosas virtudes, la película no logra ser lo suficientemente sólida como para diferenciarse de otras producciones de temática similar que se han estrenado últimamente.
Laurie es la clave para disfrutar este híbrido entre 'CSI' y 'ER'. Aunque la serie tiende a ser repetitiva, siempre logra mantener el interés del espectador.
La tensión sexual se siente en el ambiente, mientras el viento acaricia y la batería marca el ritmo. La película brilla especialmente en su aspecto visual.