El británico Edgar Wright utiliza diversos elementos de la década de 1960, les da un nuevo brillo y los presenta con su particular estilo. Su película resulta ser constantemente liviana y absurdamente entretenida.
No llega a ser un documental, ni tampoco es exactamente una película narrativa: es independiente. El equivalente cinematográfico a un ermitaño en lo alto de una montaña.
No hay duda de que hay un brillante drama trágico pendiente de hacer sobre la vida de Seberg. Sin embargo, este biopic de Benedict Andrews no logra capturar la esencia necesaria.
Un arrebatador romance ambientado en los 60, dulce, triste y sexy. Es menos un ejercicio artístico frenético que sus trabajos recientes, siendo más constante y satisfactorio en la forma en que presenta su material.
Si 'The Master' se centraba en la búsqueda de sentido en la próspera América de los años 50, 'Inherent Vice' revela el destino final de todas aquellas esperanzas y sueños.
Me alegro de que Sorrentino haya sacado esta película de su sistema. Estoy impresionado porque rebosa un vigor grotesco; con una narración cruda sazonada con escenas deliciosas.
En manos de un director menos experimentado, 'Hit Man' habría parecido una obra superficial y prescindible. Sin embargo, Linklater demuestra su maestría al hacer que los detalles más pequeños de la película cobren una gran profundidad.