Es un recorrido agobiante que nos hace sentir la tensión del comisario, y los pocos momentos de bondad se convierten en su mayor descubrimiento. Una trama intrigante que rinde homenaje a su protagonista.
Logra generar una sensación de incomodidad efectiva, ofreciendo una excelente introducción al cine de género en un país que solemos vincular con dramas profundos y festivales. Su enfoque fresco revitaliza la experiencia cinematográfica.
Solo por su ambición de centrarse en la gente de a pie merece un aplauso. Sin embargo, eso no significa que su ejecución sea perfecta, ya que la puesta en escena resulta tan gris como la época que retrata.
Los excesos tienen sus consecuencias. Todd Phillips y su equipo nos mantienen riendo, lo cual es un alivio. En esta película, se percibe un esfuerzo por evitar los clichés habituales.
Una lástima que esta road movie tragicómica no logre impactarnos emocionalmente, ya que en lugar de provocar risas o lágrimas, nos hace reflexionar acerca de los riesgos asociados a los clichés.
La historia alcanza un tono más intenso, lo que lleva a los gags a ser más irreverentes, pero sin dejar de lado la amabilidad. Yamada continúa destacando en su labor, ofreciendo lo que mejor sabe hacer.
A pesar de un Jason Segel algo apagado y un final que se siente alargado, 'Sex Tape' cumple con su objetivo, presentando una comedia ligera, grosera y con un toque de hipocresía.
En sus mejores momentos, esta película ofrece un deleite perverso, repleto de travesuras, humor oscuro y realidades difíciles de aceptar. Sin embargo, en sus peores instantes, se convierte en un reflejo incómodo.
Mine se siente increíblemente alejado de películas destacadas como 'Locke' o 'Naves silenciosas', las cuales logran aprovechar al máximo un elenco reducido. La falta de conexión y profundidad la hacen bastante menos impactante en comparación.
Es una narración inquietante que logra crear una verdadera sensación de angustia. Si extrañas el terror gótico, es muy probable que esta obra te atrape.