El trabajo del realizador Jesús Mora es notable. Con claridad y paciencia, logró transmitir este episodio, complementado por un excelente montaje, una banda musical adecuada y una fotografía de alta calidad.
El film se convierte en una divertida comedia a la que el director Nicolás López supo imponerle la suficiente simpatía, con elementos técnicos muy correctos que acompañan su azucarado y entretenido guión.