Chan-wook introduce diversión y belleza en el thriller de los 70, elevándolo por encima de la última adaptación de AMC de le Carré, 'The Night Manager'. Su gran reparto hace que sea mejor
Es el mejor trabajo de diseño de producción desde que terminó 'Mad Men', estupendamente realizado por el veterano director de televisión Greg Yaitanes.
Es una mezcla ambiciosa de géneros y llega al final con bastante fuerza. No es una gran historia de fantasmas, ni una gran historia de amor, pero es lo suficientemente cautivadora.
Da la impresión de que los creadores honran los sucesos históricos para que los espectadores no vuelvan a cometer los mismos errores. Es una dramatización asombrosa que se puede admirar a varios niveles.
'Black Monday' está repleta de decisiones importantes y atrevidas que te retan a aburrirte y salen ganando el 90% de las veces. Sin embargo, también presenta varios aspectos negativos que impiden que sea una serie completamente satisfactoria en su desarrollo.
Un final excepcional. Los saltos en el tiempo demuestran que los creadores son conscientes de que tienen poco tiempo y desean llegar al núcleo del tema.
Sus buenas actuaciones y su reconsideración tardía del papel de Monica Lewinsky no son suficiente para salvar una propuesta fútil sobre un asunto público.
Hace demasiadas referencias a 'The Silence of the Lambs' y es excesivamente respetuosa con las series de procedimientos policiales. Acaba convirtiendo al personaje en algo inmaduro y común.
Una serie que nos transporta al pasado y que resulta significativa en la actualidad. Está bien equilibrada y se enfoca en avanzar sin ceder a actitudes groseras o a la explotación de lo morboso.
[Crítica 3ª temporada]: Después de sólo tres episodios, la temporada 3 tiene su propia fuerza genuina. (...) aun sin ver el plato principal, es fácil deducir que será tan sabroso como los ofrecidos en el pasado.