Está escrita, producida y dirigida por el Sr. Johnson con una limpia claridad documental, e interpretada con superlativa flexibilidad y fuerza emocional por Joanne Woodward en el papel principal.
Con mucha humanidad y humor, esta película logra captar el interés del espectador de manera absorbente, además de poseer un poder emocional que perdura en el tiempo.
Una película impersonal que construye un gran campo para la acción aleatoria en torno a Jesús, pero hace muy poco por construir una personalidad viva para Él.
Vasta, asombrosa y hermosa, con tonos en constante cambio. Sin embargo, se siente agotadora y carente de humanidad. Le falta ese magnetismo personal y la tensión atrapante del misticismo y la poesía que esperábamos que prevalecieran.
Stevens ha hecho un trabajo soberbio plasmando en la pantalla el drama básico y la escalofriante autenticidad de la obra de Frances Goodrich-Albert Hackett.
Sus mejores características son los vívidos aspectos que presenta sobre la injusticia social y el desequilibrio en una tierra primitiva y desgobernada.
Tiene todo lo que una comedia sobresaliente debe tener —un guion ingenioso y romántico, el sabor de la elegancia de la alta sociedad y un reparto espléndido.
Estamos de acuerdo en que Mr. Presley no resulta muy convincente en su papel. Pero de alguna manera esta película consigue ser un entrenimiento moderadamente brillante. No es explosiva, pero tiene chispa.
A pesar de una producción sólida y cuidada, así como de un reparto visualmente atractivo, el drama carece de emoción. 'Day of Wrath' es visualmente agradable, pero resulta insípida.
Esta emocionante historia de intrigas reales y banderizos feudales, de justas y ataques de castillos y de cortejos a hermosas doncellas, está sorprendentemente bien reconstruida.