A pesar de que trata asuntos serios y en ocasiones contradictorios, Hamidi logra mantener un tono sorprendentemente ligero y coherente durante la mayor parte de la película.
Parece que ha llegado un Noé más maduro, que resulta más calmado y menos manipulador de lo que fue Haneke en 'Amour', pero con un final similarmente impactante.
Un drama cuyas ideas eclipsan a sus personajes. Pariser no logra definirse entre explorar a fondo teorías y sistemas políticos o enfocarse en los personajes que los manejan y trabajan con ellos.
Un guion bien construido pero no exento de clichés. 'Marry Me, Dude' se presenta con atractiva estética en la gran pantalla, aunque su apartado audiovisual resulta predecible.
Aborda el tema de forma cálida, humana y desde lo femenino, rodada con la atención habitual que pone Virzi no sólo en los personajes sino también en el amplio marco sociopolítico.
'Attenberg' es una experiencia cautivadora y vagamente perturbadora. Tsangari aprovecha al máximo las cualidades de Labed, creando una conexión única que resuena a lo largo de la película.
Bella, pero extremadamente revestida de clasicismo. Los cinéfilos que sean fans del trabajo de Enyedi se quedarán preguntándose si su voz idiosincrásica se tomó unas vacaciones durante la realización de esta película.