Otro violento desvarío de Kim Ki-duk. El estilo se aproxima a lo grotesco, la estética es tremendista y retorcida, el protagonista me parece uno de los actores más infames que he visto nunca.
Consigue hacerme reír y en ciertos momentos estallar en carcajadas. Presenta un guion meticuloso, repleto de ironía y cinismo. Además, incluye una de las actuaciones más memorables que he visto de Javier Bardem.
Es un trabajo notable de Kenneth Branagh, respaldado por un talentoso elenco. Su enfoque estilístico busca crear una narrativa visual que se aleje de las convenciones típicas del cine comercial.
No es una gran película, pero la encuentro estimable. Se nota que la directora cree en lo que está narrando, sabe transmitir lo que sienten esos voluntarios náufragos.
La película es una de las más absurdas y superficiales que he presenciado en el festival de Cannes. Carece de autenticidad y no entiende lo ridículo de su propia trama.
El planteamiento de 'El atentado' resulta impactante. La narración es razonablemente efectiva, aunque el desenlace no alcanza las expectativas que la trama inicial había generado.
Me recuerda mucho a 'El secreto de sus ojos'. Está bien escrita, con diálogos brillantes y una excelente calidad visual. Los actores son creíbles; sin embargo, el desenlace, que busca ser original, me dejó sorprendido.