Si la última impresión que dejan las series es la que perdura, 'Transparent' será recordada por sus aspectos menos favorables: indecisión, imprecisión y carencia de seriedad.
Stone muestra un notable dominio de su personaje. La obra está perfectamente estructurada y logra sumergir a los espectadores en un mundo ficticio que, a pesar de ser diferente al nuestro, resulta instantáneamente familiar.
La serie carece de habilidad para manejar la incertidumbre, lo que la convierte en una experiencia difícil de disfrutar. Se lamenta que no se haya explorado una narrativa más sutil, conmovedora y profundamente humana en medio de su temática apocalíptica.
Un análisis profundo de los personajes que resulta satisfactorio y revelador, abordando cómo la revolución sexual ha decepcionado tanto a hombres como a mujeres.
Ratifica que el director es un especialista en explicar los lazos que unen a las distintas personalidades en medio de una crisis compleja. Ofrece una excelente aproximación a Nixon para aquellos que no sepan nada sobre él.
Carece de originalidad más allá de un estilo chabacano y ordinario que parece destinado a familias con niños jóvenes, probablemente el único tipo de espectador que pueda digerir la vacuidad de esta serie.
Está en ese grupo de comedias que tratan los asuntos sociales de forma clara y efectiva. Es una representación con varias capas de la manera en que la política divide a las familias.
Esta historia se inicia con narrativas bien definidas, una estética visual impactante y una actuación principal cautivadora que revela a Fett sin perder su esencia.
Gadsy se destaca en provocar admiración en lugar de risas, mostrando una notable capacidad para comunicar sus convicciones de manera clara, aunque su habilidad para la magia cómica podría no ser su mayor fortaleza.
Un enfoque astuto y sumamente divertido dentro de su categoría. La serie demuestra una profunda autoconciencia y un propósito claro en la narrativa que desea transmitir.