A pesar de sus deslumbrantes efectos visuales y su ambición de ser ingeniosa, la película no logra resultar tan estimulante ni convincente como se esperaba. El notable elenco no logra salvar una propuesta que se queda corta.
La reciente adaptación de 'Los cuatro fantásticos' se siente atrapada en las fórmulas más básicas. Su narrativa avanza sin energía, mostrando una mediocridad que, en el género de superhéroes, es tanto preocupante como alarmante.
Puede que su cine tenga un toque de fórmula y planificación, pero también está lleno de encanto y emoción, mostrando el verdadero arte de complacer al público.
La historia, aunque se aleja de las dos primeras entregas, se cuenta con gran precisión y sensibilidad. Se caracteriza por su radicalidad y cuenta con momentos de bello lirismo.
Franco se destaca como narrador, pero principalmente como un provocador. Su habilidad para explorar las miserias y perversidades humanas se manifiesta claramente. La segunda mitad de la película se convierte en una serie de actos degradantes y ruines.
Salazar mantiene un enfoque constante en su protagonista, revelando su robustez a través de una mirada íntima y cruda que transmite una profunda angustia. Es un verdadero desafío actoral para Liliana Biamonte, quien carga con el peso de todas las escenas.
Camp logra crear un producto bastante sólido, presentando una visión crítica del mundo de la autoayuda, acompañada de una ironía que recuerda a ciertos momentos de 'Amor sin escala'.
La narrativa de 'Tierra nocturna' captura la atención y despierta un profundo interés gracias a su fascinante fusión de elementos fantásticos que entrelazan lo espiritual, surrealista, paranormal y sobrenatural.
Un interesante ejemplo de found footage que se adentra en una historia criminal con sorprendentes giros. El producto final logra ser tanto cautivador como desalentador.
No es una narrativa característica por su delicadeza, pero presenta una historia intensa. Es, sin lugar a dudas, un k-drama que refleja toda su esencia y ambición.
Un análisis básico de la gestión de marca, que se presenta como una celebración sin emoción ni grandeza del mejor jugador del mundo. Este "detrás de cámara" no será recordado en el ámbito de un género que ha contado con auténticas obras maestras.
Cuando parecía que 'The Outsider' se ajustaría a los estándares del thriller clásico, comienzan a surgir elementos paranormales, lo que añade un nivel de complejidad a la trama.
A pesar de sus notables altibajos y gracias a su atrevimiento de nombrar las cosas sin tapujos, se presenta como una refrescante excepción dentro del contexto latinoamericano.
Algunas buenas ideas iniciales, unas dignas actuaciones y un director con interesantes dotes narrativas se ven derrumbados por la búsqueda de trascendencia y la grandilocuencia con que se resuelve la trama.
'C'est pa moi' es una obra cinematográfica caótica y cautivadora. Un collage visual enriquecido por el trabajo de la fotógrafa Caroline Champetier y el diseñador Florian Sanson, que refleja el inconfundible espíritu punk que ha caracterizado a Carax a lo largo de su carrera.