Más de una escena incorpora elementos humorísticos que, de ninguna manera, están reñidos con el verosímil que Chomko construye pacientemente; (...) En otras instancias, en cambio, el trazo grueso toma por asalto la historia.
La repetición de temas y situaciones hace que 'Regreso a casa' circule luego en una espiral emocional que desemboca en una coda sensiblera y esencialmente pueril, que erosiona con un golpe de diseño de guión lo que había intentado escribir pacientemente con otra clase de argumentos.
No funcionaría sin la notable química entre las actrices protagónicas. El trazo grueso es el orgulloso camino que espera a las cuatro chicas, pero la velocidad y la ejecución de los gags y situaciones humorísticas son casi siempre efectivas.
Todo es bien grasa y a mucha honra, aunque en cada secuencia extendida de acción se extraña el carácter físico y la precisa geometría de la puesta en escena que ha hecho de las diversas misiones imposibles de Ethan Hunt un verdadero placer genérico.
Merece destacarse por su estructura, intenciones y resultados, alejados por completo del formato usual de los contenidos con raíz en lo real disponibles en las plataformas de streaming.
Aunque el film del director de El día de la bestia alcanzó el mismo éxito que su anterior obra, hay poco del espíritu que caracterizó al cine español: solo un ligero golpe a la hipocresía en una historia que avanza hacia una simple rutina cómica.
Lo más interesante de 'Corralón' son algunos de sus apuntes sociales, aguafuertes audiovisuales de fugaz duración; el resto es rutina, suspenso mínimo, misantropía espuria.
El director aborda este retrato social y generacional con energía y un gran énfasis en la interacción entre las dos protagonistas y su grupo de amigos bikers.
Nada nuevo bajo el sol: el cine del director en general difícilmente pueda ser definido como sutil. Pero esa bravura técnica y estilística que podía aportarles brío a varios pasajes de sus films anteriores parece aquí fuera de lugar, autoimpuesta.
No hay nada aborrecible en esta nueva versión, sin embargo, en comparación con la original y creativa interpretación del italiano Matteo Garrone de 2019, resulta difícil no notar la sensación de producción rutinaria. Esta película se siente como una "remake" innecesaria.
Sin esconder nada pero tampoco cayendo en una denuncia simplista, el film británico condensa en 90 minutos cuatro años de la vida del animal, logrando una gran intimidad y empatía.
En 'Gunda' no hay música que empuje al espectador a sentir tal o cual emoción, aunque los sonidos de la naturaleza conforman una compleja construcción sónica.
El resultado es extraño, pero nunca fascinante; espectacular, pero no ameno; circunspecto, pero poco profundo. Y un poco chabacano, como un ejercicio práctico de escuela religiosa con presupuesto de varios millones de dólares.
No se parece a casi nada que pueda compartir la cartelera en estos días. Tal vez, prometa más de lo que brinda. Aunque, nobleza obliga, lo hace con cierta gracia.
Lo más inquietante de la nueva película de los Spierig se acumula en el primer tercio de la narración. De a poco, sin embargo, todo comienza a irse al diablo, reemplazando la sugestión por los más trillados golpes de efecto.