Beigbeder acierta con el tono, muestra bastante desenvoltura como narrador y se luce tanto en la dirección de actores como en la elección de la banda sonora.
El enfoque realista de Rémi Bezançon sobre la maternidad se siente limitado desde el comienzo, cuando la película se presenta con un tono encantador que recuerda a una comedia romántica.
Metáforas y alusiones que exigen el compromiso y la participación de un espectador que está habituado, incluso en el cine político, a un rol más pasivo.
Diritti centró su enfoque en la composición visual, lo que resultó en una reducción de la fuerza de su narrativa histórica, convirtiéndola en una experiencia más aséptica.
Canet navega por el género con notable maestría, sin embargo, la historia de amor que fundamenta el relato carece de la convicción y la intensidad necesarias para ser realmente efectiva.
Algún humor involuntario y una notable exhibición de musculosos torsos masculinos no logran compensar las largas dos horas del filme, que se sienten –en exceso– cargadas de diálogo.
'César debe morir' es una de las más destacadas creaciones de los Taviani. Su profundidad dramática es notable y provoca una profunda emoción a través de su intensa fuerza y visceralidad.
'Elena' se presenta como una obra intensa y rica, explorando distintos planos temáticos que invitan a variadas interpretaciones. Su calidad formal es digna de elogio.
Donzelli logra realizar una película que, a pesar de abordar constantemente el tema de la muerte, logra infundir esperanza en el público y transmitir una sensación de confianza.
Meyers opta por una fórmula clásica y lo hace con cierta habilidad, centrándose más en el carisma de los actores que en la sutileza de un guión que ha sido objeto de muchas críticas.