Notable película con características formales de exultante colorido artístico: una preciosa luz y una especial banda sonora que aportan tanto atmósfera de inquietud como claridad tonal.
Parece batir el récord mundial de incompatibilidad para el amor de la historia hacia la hora y diez de metraje, sostenida hasta entonces por la verdad de su brillante protagonista femenina, comienza a hundirse.
Tras 'Bohemian Rhapsody', 'Rocketman' y 'Yesterday', es la hermana mustia y poco agraciada, resultando pedestre en la filmación de los contados momentos de musical clásico.
Funciona como secuela natural de 'Homecoming', pero también como continuación modesta, juvenil y refrescante de esa odisea del lujo llamada 'Vengadores: Endgame'.
La narración presenta cierta confusión y un eje central redundante, pero destaca por su creatividad. Los 20 minutos finales son especialmente intensos, ofreciendo un clímax estético memorable que resalta su estilo expresionista.
Gran ejercicio estudiantil convertido en estimable película. Apunta con sutileza a varios subtextos, pero luego elige no desarrollarlos. En su mejor momento, comienza con un plano fijo portentoso.
Una curiosa distopía feminista, con una imagen de impresionante colorido y originalidad. Sin embargo, la película no logra encajar su cóctel de referencias cinematográficas en las tramas y subtextos. Su guion carece de contenido.
Se notan los conocimientos, las vivencias, la delicadeza, el dolor y la falta de explicaciones. Y todo se agradece. (...) la película es terrorífica como retrato de la impotencia. Y en un tema así eso es perfecto.
Es mejor cuanto más atrevimiento decide imponer su director. Sin embargo, le falta altura y profundidad, optando en cambio por una sutileza y simbolismos que resultan más pétreos que brillantes, sin explorar los complejos universos teológicos.
Notabilísima, 'Thelma' se hace grande en ese soberbio sentido del espacio de Trier, y en su maestría para jugar con los sonidos, la luz y el color. Un puñado de imágenes imborrables, de esas que erizan la piel.
Con más exceso de almíbar que delicadeza, apenas ofrece virtudes cinematográficas y no logra establecer una cierta credibilidad social, a pesar de estar basada en una historia real.
Con una fotografía brillante llena de colores contrastantes, que refleja perfectamente la temática, y un tratamiento de sonido y música cautivador, 'Amar' se sumerge de lleno en la verdad sin concesiones.
La película es, ante todo, un triunfo en su tono, equilibrando drama y comedia de manera efectiva. Podría considerarse el 'Love Story' de la generación 'hipster'.
Con una exquisita sencillez en la puesta en escena, ágil y sin grandilocuencias (...) fija su objetivo en los rostros, en las reacciones, en las tristezas y las carcajadas de unos críos inmersos en la batalla cotidiana de la sociedad colegial.
La película logra establecer su propio estilo y auténtica identidad a través de diálogos muy creíbles, generando un impacto en el espectador que se siente más emocionado que intelectualmente desafiado.
Senez muestra con dulzura dramática en la notable '9 meses' el recorrido por un camino desconocido de dos adolescentes a los que se les ha echado la vida encima.