Nadie diría que es un trabajo universitario, dada la brillantez visual y narrativa de este modesto, delicado y sensible retrato, que captura el aire de un barrio popular casi con la maestría del Guerín de 'En construcción'. Muy recomendable.
Desde los primeros minutos, Donaldson y su equipo logran captar la atención del público. La narrativa se desarrolla con agilidad y confianza, aunque al final parece perder un poco de impulso.
Un drama rural intenso y apasionado, presentado de manera clara y sin adornos a través de un cine directo y funcional. Es una obra destacada del cine español.
Un sencillo melodrama que explora el sentimiento de desarraigo a través de personajes bien definidos. Aunque el inicio es grato y honesto, su conclusión se torna poética, algo que no le favorece.
Retrato árido, crudo y desesperado. Guzzoni elige un tono y una narrativa muy contemporáneos, que en ocasiones evoca el estilo de los hermanos Dardenne y en otras recuerda a Jaime Rosales.
Kosinski intenta ofrecer una narrativa profunda, pero acaba siendo confusa y carente de emoción. Aunque no es una película totalmente despreciable, su ambición desmedida le ha pasado factura.
Es una experiencia que trasciende el séptimo arte, un musical vibrante y apasionante que invita a moverse, a sentir una conexión espiritual y a expandir la perspectiva. Un verdadero llamado a la felicidad y a la solidaridad.
Lo más destacable de “Aute retrato” es la forma en que transmite al espectador un profundo amor por el trabajo. Sin embargo, su presentación visual se siente algo rutinaria y convencional.
La película está llena de demagogia ideológica, con un uso excesivo de saludos militares y reflexiones simples sobre el honor. Además, su discurso parece más apropiado para un parvulario y no aporta mucho sobre la inutilidad de las guerras. Lo más destacado son, sin duda, los primeros 20 minutos.
La película se caracteriza por una calma expositiva, un ritmo pausado y la habilidad de su director para utilizar los silencios a su favor. Con un humor que a veces roza lo surrealista, resulta ser una obra modesta pero cautivadora y estimulante.
Apoyado en la química perfecta entre Rohrwacher y Canet, Brizé nos ofrece una historia de amor llena de melancolía, elegancia y un ritmo pausado. Un trabajo que resalta su habilidad como director.
En Grau siempre se puede contar con un excelente director, quien revolucionó los años sesenta con su cine moderno. Sin embargo, no siempre las tramas cumplen con las expectativas, y en el caso de 'La trastienda', el argumento resulta ser muy limitado en términos de interés.
Es una película atrevida que provoca reacciones extremas. El público será cautivado por su obra sutil y refinada, destilando sensualidad y con una puesta en escena elegantísima, además de una fotografía creativa que resalta su belleza.
Es una obra inesperada que asombra constantemente gracias a su versatilidad, alternando entre el drama y la comedia excéntrica, así como el thriller y los matices de una road movie. Cada giro sorprende, ya sea de forma positiva o negativa.
Con este material, Siegel o Aldrich habrían creado un thriller seco y sintético. Espinosa se sitúa en un punto intermedio con una dirección nerviosa y funcional, pero carece de la potencia que mostraban Tarantino o Fuller en sus mejores obras.