La épica obra de Ridley Scott presenta una impresionante combinación de caballos, balas de cañón y extraordinarias actuaciones, destacando la interpretación de Joaquin Phoenix como Napoleón y la de Vanessa Kirby como Josefina.
Una película asombrosamente hermosa, desgarradora, trágica y tierna, que se construye plenamente en torno a dos interpretaciones absolutamente comprometidas.
Una crónica detallada de la vida y la obra de la artista sueca, y a veces mística, Hilma af Klint que defiende de manera interesante que habría que reescribir la historia.