El pequeño milagro técnico de tener a cuatro Keatons interactuando en la misma escena es impresionante. Pero aparte de eso, 'Multiplicity' no aprovecha a esos cuatro hombres de los 90.
Cada escena respira con una frescura que lleva a este diminuto romance más allá del reino de la monería indie, en el mundo de un personaje por el que merece preocuparse.
Una de las películas más originales y emocionalmente profundas del año. Cada cambio de escena ofrece información esencial sobre lo que implica guiar o ser guiado en un territorio desconocido.
Con muy pocas modificaciones, los problemas afectivos de estos seis jóvenes neoyorquinos pizpiretos podrían ser reconvertidos en episodios de 'Cómo conocí a vuestra madre'.
Una película indie cautivadora y compleja que dramatiza el proceso científico, presentándolo como esotérico y seductor, pero también como algo cotidiano y accesible.
Sexo ligero e inyecciones raciales han reemplazado a los -más atrevidos- aspectos políticos de la original, un rudimentario clásico de la factoría Corman.
No hay nada nuevo en esta producción, lo cual es un gran inconveniente. Además, nada resulta realmente divertido o atractivo, lo que agrava aún más el problema.
El poder de esta gran historia - en parte comedia, en parte tragedia, en parte sátira y en su mayoría, una obra maestra, está en los detalles. Una de las mejores películas del año.
Hay pocos placeres cómicos que sienten mejor que las pelis en las que se ve a gente supuestamente normal comportándose de forma terrible. Y si esos personajes transgresores están interpretados por actores populares, mucho mejor.
Requiere una tremenda moderación no concluir que este entretenido embrollo apocalíptico no trata de nada, ya que bien podría tratarse de todo. Pero lo dudo.