Gonzalo Boye se destaca en la pelea y el enfrentamiento. Sin embargo, la película no brinda al espectador la oportunidad de experimentar esa confrontación. Al final, se presenta un retrato que resulta tan pulcro e interesante como finalmente fallido.
La película no logra mantenerse firme en ningún momento. Intenta ser un biopic convencional, pero termina siendo un ejercicio torpe y desestructurado, además de muy predecible. Es una verdadera pena.
Como ya hizo en el extraordinario 'Senna', Kapadia no busca realizar una hagiografía ni generar tumulto. La narrativa se sitúa entre una profunda declaración de amor y un meticuloso trabajo documental. Por estas dos razones, resulta impresionante.
La película intenta distanciarse de los clichés típicos del 'biopic', aunque lo logra con dificultad. Sin embargo, ofrece un sorprendente trabajo de un gran actor.
Del Toro es el mejor 'robaplanos' que ha dado el cine reciente. La historia fluye con naturalidad, y Di Stefano logra evitar caer en tópicos innecesarios, tocando solo los imprescindibles. Es una obra solvente, sin duda.
Quiere ser a la vez un documento histórico, un monolito y un retrato irrefutable, pero lo logra con tanto cuidado y claridad expositiva que se siente carente de aliento.
Un magnético, carnal y nada místico paseo por un planeta habitado por una extraña sensibilidad. El problema es que la película oculta demasiado en medio de la nada. El uso de frases enigmáticas y adivinanzas melancólicas confunde más que intriga, dejando al espectador perdido en lugar de sugerir algo.
López pinta, dibuja y se enfrenta a la forma de un árbol. Erice, por su parte, se coloca detrás y observa. Esta obra es tanto sincera como sencilla, situando al cine en terrenos arriesgados que solo han sido explorados por algunos maestros.
Todo deslumbra. De repente, los espacios luminosos e inmensos del desierto sirven para describir los siniestros vericuetos de un alma atormentada. Más de tres horas y media cerca de la hipnosis.
Ni un milímetro de la película está ahí con otro objetivo que no sea arrasar. Su intención es negar al espectador la capacidad de respirar. Más Lorca que el propio Lorca.
Todo es disfrutable en una cinta con tan limitados prejuicios como sobrada de recursos. Brillan las escenas de acción y dan dentera los alardes de terror. (...) Las lecciones morales son de un torpe que raya lo inmoral (...) Puntuación: ★★ (sobre 5)
Después de la delirante exhibición de vísceras descontroladas en 'Re-animator', Gordon retoma un relato de Lovecraft con el propósito claro de capitalizar su fama.