Este drama francés inicia con una premisa impactante y elegante, aunque a su vez se siente algo trillado. Sin embargo, sufre de dos fallos significativos: la falta de sorpresas en la trama y una realización que tiende a ser excesivamente pretenciosa.
Los cabos que quedan sueltos son numerosos, al igual que los que aparenta resolver. Sin embargo, para mí, esta propuesta resulta ser increíblemente productiva.
Una curiosa y a ratos apasionante peripecia religioso-costumbrista con pequeñas parábolas morales y una clara defensa de las glorias de la carne en contraposición a las enseñanzas religiosas. La película resulta simpática y desafía las modas conservadoras actuales, siendo una propuesta inusual e interesante.
La película es impactante y está narrada de manera efectiva, aunque en algunos momentos se siente un exceso de intención en su mensaje. Sin embargo, su forma de contar la historia es astuta y, en esencia, completamente aceptable.
Una película con una trama sencilla y directa, pero que destaca por su humor e ironía encantadores. Sus enseñanzas, presentadas de forma amena y sensata, muestran un atractivo sutil que la hace memorable.
Costoso puzzle de aire férreamente teatral, que va decayendo desde la brillantez de su comienzo hasta un final abrupto. Hipólito y Pataky le salvan las castañas, destacando lo mejor de la obra.
Estructurada como una road movie en tren, presenta una serie de peripecias que, aunque pueden parecer algo inconexas e ingenuas, logran captar la atención del espectador.
Pequeña joya, una hermosa metáfora sobre el conocimiento y el aprendizaje. Lichtfeld presenta un filme sólido e irónico que, al adentrarse en territorios nórdicos, rinde homenaje al gran Kaurismaki. Una obra humilde y sabia, realizada con amor y sin excesos: un grato descubrimiento.
Película rutinaria, discretamente efectiva. La química entre Hayek y Brosnan funciona, aunque la presencia de Harrelson, un actor desquiciante, resulta un tanto molesta. Ratner demuestra ser un artesano eficaz, adaptándose con humildad a las necesidades narrativas de la trama.
Ese irónico Belmondo, más guapo como Ballesta, junto a la elegante y distante Valverde, aportan profundidad a un film maravillosamente narrado, con un trasfondo sombrío.
Una de las más destacadas producciones latinoamericanas que aborda la juventud de manera meticulosa. Esta ópera prima sorprende por su madurez. Con un lenguaje e imágenes impactantes, su narrativa surge desde lo más profundo, integrando la emoción con la reflexión.
El filme incluye todos los elementos esenciales de su género: acción, suspense y personajes cercanos. Sin embargo, deja una sensación de repetición. Aún así, mantiene el interés gracias a la habilidad de su creador, su intriga constante y el talento del elenco, incluyendo a Gillain.