Un tropiezo. La película presenta ingenio en los diálogos y propone situaciones interesantes. Sin embargo, a pesar de estos aciertos, "Reinas" naufraga debido a ciertos aspectos, como el uso excesivo de estereotipos relacionados con la homosexualidad y una interpretación cuestionable de las relaciones entre madres e hijos.
Fórmula efectiva. A la vez comedia llena de giros inteligentes y diálogos brillantes, y película de acción, no se puede pedir más para pasar un rato entretenido.
La película exhibe un desbordamiento de testosterona, mostrando un machismo evidente y diálogos poco logrados. Sin embargo, también destaca por su dominio técnico en la narración, presenta una acción intensa y mantiene un uso habitual de la inverosimilitud en su trama.
No es más que un inmenso vehículo para el lucimiento del gran Harrison Ford. El actor ofrece una actuación magistral, demostrando una gran capacidad de autoconocimiento y un talento excepcional.
Con momentos de gran belleza plástica, Lluís Homar brilla en su actuación. La trama evoca un 'El padrino' vaticano, tejiendo un entramado de traiciones, muertes y defenestraciones. Es un carnaval siniestro que siempre provoca una profunda reflexión.
Un título necesario. Para mostrar caminos, para que las nuevas generaciones de cineastas aprendan algo más que estilemas de género. Es una película dolorosa, implacablemente bella.
Impresionante. Un verdadero ensayo cinematográfico sobre cómo se construye y consolida la imagen, convirtiéndose en una reflexión sobre cómo mostrar el terrorismo.
Rutilante, implacable y torrencial peripecia animada. No puede ser más original el arranque del filme. En la primera mitad de la película está lo mejor de la propuesta. Lo demás, aunque es interesante, queda un poco por debajo.
Mills presenta una película con numerosos elementos atractivos, destacando su manejo del humor de manera ingeniosa y una estructura que da giros inesperados.
Cándida, una historia algo azucarada pero encantadora sobre amores lésbicos y minorías raciales en EE. UU., se disfruta con agrado. Su guión es lo suficientemente inteligente como para mantener el interés sin decaer.
Es engañosa por aparente simplicidad, salvajemente divertida y tiernamente iconoclasta. Esta obra demuestra que el dinero importa poco cuando hay talento de sobra.