Neville se adentra en un paseo costumbrista por una calle madrileña a comienzos del siglo XX, ofreciendo un retrato vitalista y preciso de sus personajes. Destaca su habilidad como comediante, equilibrando lo emotivo con lo absurdo.
Todo un emblema del cine de aventuras, dirigido por Henry Hathaway, un cineasta del Hollywood clásico que demostraba su habilidad en diferentes géneros y cuya esencia iba más allá de las historias que contaba. Insuperable Gary Cooper.
El maestro [Chaplin] recorre los turbios años de la fiebre del oro para entregar una despiadada sátira social en la que incluye algunos de los momentos más tiernos de su cine.
Película apasionante que radiografía a un personaje dibujado con trazos de maestro. Una obra maestra indiscutible, cima de la carrera de un cineasta comprometido, agresivo y turbulento.
Lean, cineasta genial, logra que sea su mirada como director, la reposada puesta en escena, sensible, atenta, la que haga nueva una historia en el fondo convencional, que el espectador ya conoce.
Aunque denostada en su día, esta visión de Vicente Aranda de la Guerra Civil española es una película interesante, aunque en exceso desajustada, de un cineasta que suele moverse contracorriente.
Apasionado viaje en el que ambos protagonistas se aman y se odian. A principios de los años setenta, el cine estadounidense brindaba exaltaciones de la emotividad como 'Tal como éramos'.
La aproximación más inquietante de la historia del cine hacia el universo infantil adapta una espléndida novela del actor y escritor Tom Tryon, logrando así uno de los filmes más surrealistas jamás rodados. La cámara de Mulligan captura las expresiones de ambos niños, sumergiéndonos en un mundo aterrador donde lo fantástico convive con la realidad,
Un filme comprometido y contestatario, rodado con furia y con un dominio visual impresionante. Barbara Hershey ofrece una actuación en la que combina dureza y sensualidad de manera magistral.
Retrato de personajes y emociones, aunque éstas resulten almibaradas en muchos momentos. Garci no logra capturar la belleza que sí encerraba su anterior obra, 'You're the one'.
Un film correcto, pero en el fondo anodino, en el que Kiefer Sutherland aporta su solvencia actoral y Emily Lloyd, una actriz siempre infrautilizada, su extraordinaria frescura interpretativa.
Un contundente alegato en favor de la libertad de expresión, además de una llamada a la responsabilidad periodística en tiempos difíciles. (...) una obra que hace de la concisión emblema estilístico (...) Una maravilla.