Lo que comienza como un curioso cruce entre 'Matrix' y las películas de Bruce Lee se transforma rápidamente en un gran espectáculo de acción que resalta las acrobacias de Jet Li. Este despliegue deslumbrante de efectos especiales esconde un guión que confunde confusión con complejidad.
Una curiosa producción alemana que comienza con energía, pero a medida que avanza se siente que pierde fuerza. El relato no consigue evitar los clichés y utiliza algunos recursos previsibles.
Mediocre thriller. La premisa es tan común que lo único interesante podría haber sido la dirección, pero eso tampoco es sorprendente. Al final, solo se destaca el desempeño adecuado de Quaid y Glover.
Sorprendente y dura combinación de thriller y road movie. Sin recurrir a efectismos ni gratuidades, Senna elabora una reflexión acerca de la violencia y de su posible fascinación.
Ron Howard es un director que no logra plasmar la tensión que este drama necesitaba. A pesar de ello, las secuencias de acción son destacables y el desempeño de los actores es notable, aunque deben enfrentarse a personajes unidimensionales.
Uno de los íconos del cine policiaco de los setenta. Eastwood observa de reojo como solo él sabe y Siegel ofrece su maestría, nervio y un notable sentido del ritmo narrativo. Aunque ha sido imitada por múltiples películas, ninguna de sus réplicas ha logrado superarla.
Obra maestra. Una película siniestra que sigue las andanzas de un asesino de niñas. Muy pronto, Vajda la convierte en un terriblemente crudo retrato de la miseria, escondido bajo una trama policíaca que se alimenta de gestos escabrosos.
Relato heterodoxo e inclasificable, repleto de ironía pero también de desasosiego, transgresor y sarcástico, surrealista y cómico, terrible y llano. Espléndido.
Espléndida película, la novedad radica en que el filme combina animación tridimensional generada por ordenador con los clásicos dibujos pintados a mano, creando una experiencia visual única. Es una obra de ciencia-ficción rebosante de espíritu aventurero.
Excitante incursión del Sturges en el cine de ciencia-ficción. En su momento fue el filme que abrió nuevos caminos al género y, aunque haya envejecido un tanto, está muy bien escrita y mejor filmada. Sólo echar un vistazo al reparto ya resulta estimulante. Interesante.
Una alucinada inmersión en la angustia existencial y un demoledor retrato de la bestialidad humana. Una aventura tan excitante como terrible, sostenida por unas imágenes secas, contundentes, abrasivas.
La mejor adaptación de Jules Verne. Supo inundar de espíritu aventurero las imágenes de esta película inolvidable, ofreciéndonos una lección de sabiduría visual y capacidad creativa.
No es una obra maestra, pero sí un film modesto que, sin hacer ruido, se combinan las maravillosas canciones (...) y la pulsión romántica que sabe destilar Charles Walters.
Discreto telefilme sostenido por la inquietante presencia de Ray Liotta. Tiene una cuidada factura técnica y su guión logra mantener la intriga con eficacia.