La mejor adaptación de la novela de Charlotte Brontë hasta la fecha, con una recreación precisa y sustancial que rebosa poesía, aunque al final se siente limitada por un exceso de inteligencia y buen gusto.
Oldroyd intenta impresionarnos y definitivamente lo consigue, mientras presenta valiosas reflexiones sobre las devastadoras consecuencias del sexismo arraigado en la sociedad.
Deambula en la inmensidad de sus ambiciones temáticas, y empieza a acumular minutos y minutos de metraje llenos de caminos narrativos que no van a ningún lado y personajes que pierden el norte.
El tono de la película oscila entre lo cómico y lo sombrío, así como entre lo dulce y lo crudo. Aunque se extiende más allá de lo necesario, Garrone logra equilibrarlo gracias a un impresionante repertorio de imágenes impactantes que ofrece de manera constante.
A veces se convierte en una simple serie de experimentos formales. La directora parece no mostrarnos la verdadera esencia de sus dos protagonistas, llegando al punto de que uno casi quisiera que la historia terminara rápidamente.
A pesar de las impresionantes imágenes, los diálogos carecen de emoción y los giros de la trama son confusos. Además, los personajes son tan planos que hace difícil conectar con la historia.
La mejor película protagonizada por tortugas ninja hasta la fecha exhibe un estilo visual vibrante que irradia energía e ingenio en cada imagen y en todas las impactantes secuencias de acción.
La película, que inicialmente parecía una simple propuesta de acción influenciada por 'Acorralado' y 'Venganza', se enreda en complicadas intrigas y conspiraciones políticas.
Gracias a la energía y el afecto que el director Phillip Noyce le imprime, junto al carisma que emana Pierce Brosnan, la película se vuelve mucho más interesante y entretenida de lo que se podría esperar.
Es lamentable que utilice una metáfora acuática poco original, junto con reflexiones sobre el cosmos y los quásares, que son aportadas por la tediosa narración de Guzmán.
Los momentos musicales de 'This Much I Know To Be True' evocan un concierto grandioso, contrastando con la melancolía de 'Once More Time With Feeling', y nos presenta la simbiosis creativa entre dos artistas brillantes.
Dos personajes muy simples se comportan de manera inexplicable constantemente. Esto proporciona a la película numerosas ocasiones para el melodrama exagerado, las incongruencias en la narrativa y un humor no intencionado.
Una colección de trucos narrativos y estéticos. Lo más ofensivo es que los D’Innocenzo creen que el espectador no va a ser capaz de ver venir desde lejos el giro final que imponen al relato.
Es lamentable que Kutcher mezcle la profundidad psicológica con una actuación exagerada. El director, por su parte, se muestra aún más errático en su enfoque.
El filme intenta evocar el cine negro, pero no logra consolidarse en ese estilo. Aunque sugiere tener una trama criminal intrigante y emociones intensas, al final, estas expectativas no se cumplen.
'Dinero fácil' ofrece una narrativa cautivadora y una intensa emoción, convirtiéndola en un thriller criminal que va más allá de lo convencional. Sin embargo, el realismo tiende a desvanecerse en su tercer acto.