No puede hacer que la ficción sea más extraña que la verdad. Los dos personajes principales se sienten algo apagados, ya que se definen menos por sus objetivos concretos y más por el vago deseo de querer.
Su mayor problema es la inconsistencia de su tono. Aunque intenta ser una comedia negra rara, funciona mejor cuando explora lo que significa ser 'divino'.
Enfatiza el drama personal de Stobel por encima de la investigación académica, lo que produce una película que se deja ver, pero que es débil en el apartado teológico.
En otros documentales, Jones ha analizado cómo la grandeza puede requerir una especie de obsesión destructiva. La situación no es tan catastrófica en este filme, pero eso es lo que lo hace tan conmovedor.
Una película absorbente y desafiante, que capta la frustración de estar en el limbo de un sistema que parece dar prioridad al castigo sobre las apelaciones.
Esta reveladora película está repleta de agradables baladas de un simpático trovador; pero también muestra cómo es cantar sus cancioncillas sometido a una presión insondable.
No se habla mucho de estrategia boxística, pero sí de lo difícil que puede ser gestionar grandes sumas de dinero, una vida familiar complicada y las esperanzas y sueños de millones de mexicano-americanos.
Es apasionante en todo momento. Ver a Tiny Tim unos segundos en una retrospectiva de 'Laugh-In' o 'Tonight Show' hace que sea una rareza inexplicable. Verle durante 75 minutos dejará a la audiencia con ganas de más
Tan potente como su sujeto, la película no se detiene al presentar los aspectos positivos y negativos de ser André The Giant. Este documental es una experiencia imprescindible.