Es una de esas películas pequeñas y sólidas que fluyen con gran naturalidad a partir de una trama simple. Los cuerpos están filmados con tanto cuidado como las palabras, creando una conexión única entre las actuaciones y el guion.
Repleta de ironía hacia el cine, esta obra se sostiene gracias a personajes bien elaborados y a actuaciones destacadas. La violencia se combina de manera efectiva con el humor, y su narrativa intrincada la hace aún más impactante.
La adaptación teatral es evidente en cada plano. Los actores, aunque talentosos, interpretan personajes excesivos, mostrando una falta de control que evita caer en lo ridículo.
En 1996, 'Twister' transformó a los tornados en una amenaza aún más mortífera de lo que son en realidad. 'Twisters' amplía la magnitud de los ciclones y destina más recursos a los efectos digitales, sin embargo, la trama es prácticamente la misma que la de su predecesora.
Todo el universo de Garrel, cineasta único en el cine contemporáneo, se refleja en esta hermosa película. Es profundamente lúcida y, sobre todo, llena de esperanza.
Una película bien engrasada, bien escrita, bien rodada y bien interpretada. Pero por momentos parece que Koreeda haya perdido su centro de gravedad. Es una experiencia interesante, pero no una película definitiva.
Recreación detallada que mantiene ese carácter íntimo y tranquilo característico de las obras de Roca. Un drama cuidadosamente elaborado, que resulta muy contenido a pesar de las difíciles decisiones que enfrentan los personajes.
Es un ejercicio dinámico y cohesivo que mezcla géneros de manera efectiva y entretenida, aunque resulta patético en la construcción de algunos de sus personajes. En resumen, es provocador de forma sugestiva.
Sigue la herencia del icónico título de películas sobre asesinos a sueldo 'El silencio de un hombre'. La trama se centra en una búsqueda de venganza, presentando momentos fascinantes a lo largo del camino.
La película presenta una atmósfera muy estilizada y cuenta con una actuación destacada de Mario Casas, pero en términos generales resulta ser un gran desvarío.
El encuentro entre las protagonistas es interesante, pero la trama es muy débil. Las escenas de acción están mal ejecutadas, lo que hace que el atractivo que inicialmente tenía se pierda.
Puede ser voluntariosa y hasta simpática en su restitución de la imaginería del spagueti-western, pero también resulta enfática y gratuita en sus explosiones de violencia sádica, mostrando poca o ninguna profundidad en su tipología.
El director opta por centrarse en la trama y algunos giros impactantes en lugar de construir una atmósfera que genere verdadera inquietud o terror en los personajes. La dirección es adecuada, aunque un poco monótona.