La historia central es predecible y poco convincente, mientras que la verdadera fuerza de la película radica en las actuaciones. Sin embargo, carece de la profundidad necesaria para impactar realmente.
Ése es el encanto de las historias de Narnia: contienen magia y mitología, pero sus misterios no son resueltos por el tipo de trucos que Tolkien se sacaba de la chistera, sino por la determinación y resolución de los niños.
Esta producción tiene un gran potencial y confío en que la próxima entrega conservará su excelente estética visual. Además, espero que mantenga a los encantadores niños y que sea más aterradora, al tiempo que ofrezca una historia más sólida.
Una película de gran aspecto visual, un triunfo del diseño de escenarios y de los efectos especiales, que crean un mundo de fantasía a medio camino entre una zona residencial y un dibujo prehistórico.
La película presenta gags que podrían haber sido efectivos en los dibujos animados de Baby Herman. Sin embargo, al trasladarse a la acción real, con taxis, autobuses y calles auténticas, además de un bebé verdadero, la diversión no se materializa.
Una excursión entre diversas versiones del pasado y del futuro tan complejas que los personajes se ven en la necesidad de explicarse constantemente entre sí. A pesar de esto, la película resulta divertida, precisamente por su retorcida trama.
Los dos actores transmiten una conexión tan profunda con sus personajes que la película se transforma en una de las historias de amor más conmovedoras de 1984.
Una historia lineal o una un poco más fragmentada podría haber tenido un mejor impacto. Sin embargo, se trata de una buena película, ambiciosa y efectiva, que destaca a una joven y talentosa actriz.
Una comedia que combina ternura con humor irreverente. 'Cedar Rapids' evoca el mismo espíritu que 'Fargo', ofreciendo una experiencia cinematográfica divertida y memorable.