Esta producción tiene un gran potencial y confío en que la próxima entrega conservará su excelente estética visual. Además, espero que mantenga a los encantadores niños y que sea más aterradora, al tiempo que ofrezca una historia más sólida.
Ofrece una historia relativamente interesante con una trama que se cierra adecuadamente. Si bien esto no la convierte en una gran película, es superior a lo que sugieren los anuncios.
Otra chorrada histérica al estilo de 'How the Grinch Stole Christmas'', todo efectos y acrobacias y CGI y prótesis, sin lugar para la ligereza y el humor.
Son las mismas chorradas vestidas de oropel que hicieron que la original fuera un éxito, pero esta vez es más interesante, confiada y graciosa, a mí me gustó más.
Me encantó la película, que es genial y tiene un montón de energía, pero me sentí un tanto deprimido por su visión despiadadamente materialista de la Navidad.
El que pensó que esto era una película familiar quizá crea que los niños son duros. Está llena de imágenes grotescas que generan miedo y desesperación.
Una película de gran aspecto visual, un triunfo del diseño de escenarios y de los efectos especiales, que crean un mundo de fantasía a medio camino entre una zona residencial y un dibujo prehistórico.
La película presenta gags que podrían haber sido efectivos en los dibujos animados de Baby Herman. Sin embargo, al trasladarse a la acción real, con taxis, autobuses y calles auténticas, además de un bebé verdadero, la diversión no se materializa.
Caine actúa con firmeza y trata a los Muppets como si fueran reales. No es una tarea fácil, pero logra integrar a los Muppets en la acción de manera convincente.